El ministerio para la Transición Ecológica que comanda Teresa Ribera quiere poner coto a los altos precios de la luz de los últimos días y estudia poner en marcha "medidas provisionales hasta que se aborde una reforma de la fiscalidad energética" de la factura, según ha anunciado la propia ministra en una intervención en el Congreso de los Diputados. "Ya lo hemos hecho en el pasado y probablemente lo tengamos que hacer en el futuro inmediato", ha explicado Ribera.

Tras una pregunta del diputado del Partido Popular, Guillermo Mariscal, sobre la subida de la luz que ha llevado a que el precio mayorista en los primeros 16 días de junio esté por encima de los 80 euros el megavatio-hora de media, Ribera ha avanzado que su departamento podría "suspender alguno de los elementos fiscales con carácter provisional".

Una declaración que invita a pensar que el Ejecutivo se podría plantear suspender el impuesto a la generación eléctrica (7%) que pagan las empresas pero repercuten a los consumidores a través de la factura, como ya hizo en octubre de 2018. Después de un mes de julio y agosto con un precio medio de la luz de 60 euros el megavatio-hora y un septiembre a 70 euros de media, Ribera suspendió durante seis meses este gravamen para tratar de reducir la factura, dentro de un paquete más amplio de medidas que también daban un mayor soporte a los consumidores más vulnerables.

A falta de conocer las medidas concretas, precisamente este jueves se debate y vota en la Comisión para la Transición Ecológica una iniciativa (PNL) del Partido Popular para "eliminar" esta tasa, aunque a priori la intención del Gobierno sería suspenderla y no eliminarla, según se desprende del discurso de Ribera, que prefiere esperar para realizar una reforma fiscal de la factura a conocer las recomendaciones del comité de expertos en fiscalidad que trabaja junto al ministerio de Hacienda. "Necesitamos una revisión (fiscal) en profundidad para dar señales congruentes, para que pague quien contamine (...) pero mientras esto ocurre es obvio que el Gobierno debe ser sensible", ha añadido Ribera. 

Además del impuesto a la generación eléctrica, la factura de la luz tiene dos impuestos directos, como son el IVA del 21% y el Impuesto Especial de Electricidad del 5,11%. "Insisto en que junto a las medidas estructurales somos sensibles a otras medidas coyunturales", ha dicho la ministra. "Nos preocupa enormemente el precio d la electricidad, nos preocupan las previsiones de precios del gas y nos preocupa las previsiones de precios del CO2 y su impacto en la factura de las familias, industria y pymes", aseguró Ribera.