Aerolíneas

Un billete Londres-Barcelona costará 18 euros más al restringir las emisiones de las aerolíneas

S&P considera que las aerolíneas dejarán de disfrutar de derechos gratuitos por contaminar a partir de 2026

Un billete Londres-Barcelona costará 18 euros más al restringir las emisiones de las aerolíneas.

Un billete Londres-Barcelona costará 18 euros más al restringir las emisiones de las aerolíneas.

Irene Juárez

Los analistas de S&P Global Ratings han vuelto a advertir del impacto que tendrán las restricciones regulatorias a las emisiones de carbono sobre las aerolíneas europeas. En un informe aseguran que un vuelo Londres-Barcelona podría encarecerse en torno a 18 euros por pasajero y el billete París-Atenas podría hacerlo en hasta 33 euros. Y los transoceánicos no se salvan: volar de Londres a Nueva York podría llegar a ser hasta 90 euros más caro.

El informe asegura que no existe actualmente una alternativa rentable a los combustibles fósiles y remarca que la inversión en fuentes de energía bajas en carbono o sin carbono es cara. S&P cree que, además, las aerolíneas europeas dejarán de disfrutar de derechos gratuitos por contaminar a partir de 2026, porque la hoja de ruta de descarbonización de la UE tiene el objetivo de reducir las emisiones de carbono a un nivel máximo del 55% para 2030.

En esta coyuntura, S&P recalca que algunas aerolíneas europeas "más débiles" pueden verse incapaces de reducir estas emisiones, y tiene en cuenta que el sector aporta solamente el 2,5% de las emisiones mundiales de CO2 y el 3,8% de las emisiones europeas. "La contribución es pequeña en comparación con otros sectores" como el de la energía, que aporta el 40% o el de la industria, con un 16%.

Los expertos consideran que este sesgo se produce porque las aerolíneas suelen verse como algo "discriminatorio y exclusivo", ya que solo un 20% de la población global acapara el 80% de los vuelos. Sin embargo, se espera que el número pasajeros crezca en un 3% hasta el 2040.

Además, los analistas consideran que los precios de las compensaciones de carbono siguen siendo inciertos, pero es posible que "aumenten junto con las presiones regulatorias". Y al tener en cuenta que "el precio del carbono es volátil" se deriva que si aumentara un 50%, el viaje a Barcelona sería 27 euros más caro, casi la mitad más de lo que vale ahora.

Volar fuera del Espacio Económico Europeo

El informe concluye que es "poco probable" que los motores eléctricos desempeñen un papel en la reducción de CO2, pero sí que puede tener un impacto crear redes eficientes, mejorar la gestión de ruta y del control del tráfico aéreo. A pesar de estos esfuerzos, lo que puede acabar ocurriendo es que los operadores escojan destinaciones aéreas fuera del Espacio Económico Europeo (que también incluye Islandia, Liechtenstein, Noruega, Reino Unido y Suiza).

Por último, advierte de que aunque todas las aerolíneas europeas son "ampliamente vulnerables" a la reducción acelerada de las emisiones, algunas "estás más expuestas que otras". Aunque no menciona a ninguna en particular, concreta que esto incluye sobre todo a las que operan a vuelos de corta distancia, y tienen mayor proporción de vuelos dentro del Espacio Económico Europeo.