ENERGÍA
El 91% de las empresas energéticas en España incrementará su inversión en innovación el próximo año
El 23% de las compañías del sector destina más del 10% de sus ingresos a I+D, y tan solo un 5% afirma no tener un porcentaje definido

Molinos de viento.
El sector energético intensifica su apuesta por la innovación. El 91% de las empresas energéticas en España planea aumentar su inversión en esta área estratégica durante el próximo año, según el VI Barómetro Internacional de la Innovación de la consultora internacional especializada en financiación de la innovación y estrategia Ayming España. Por el contrario, ninguna de las empresas consultadas expresó la intención de reducir su presupuesto en I+D. Esto se debe a su compromiso para abordar los desafíos en materia de sostenibilidad y eficiencia energética. El informe recopila las respuestas de más de 1.200 directores de I+D+i, directores financieros, CEOs y directores de tecnología de 17 países de Europa, Norteamérica y Asia, con el objetivo de analizar las principales tendencias y desafíos en innovación tanto a nivel global como en España.
A nivel de negocio, las principales prioridades de innovación en el sector energético son la optimización de las operaciones y procesos (38%), implantar la inteligencia artificial (35%), la adopción de nuevas herramientas y tecnologías y la comprensión de las necesidades de los clientes (30%). Las empresas del sector energético, clave en la transición industrial española, dentro de su estrategia de Innovación, priorizan la optimización de operaciones y procesos (38%), implementación de nuevas herramientas y tecnologías (30%) y la comprensión de las necesidades de los clientes (30%).
"El sector energético está trabajando en vertebrar la transformación hacia un futuro más sostenible, centrando sus inversiones en áreas clave como digitalizar su actividad u optimizar sus procesos para poder dar una mejor y más ágil respuesta a los retos que afrontan las empresas, así como la necesidad de infraestructura y recursos necesarios. Las energías renovables, la reducción de emisiones y la eficiencia operativa son los ámbitos más críticos en este sentido", señala María Sanz de Galdeano, directora de Innovación de Ayming España. El 23% de las energéticas destina un 10% de sus ingresos a la Innovación, mientras que un 13% destina hasta un 8% de su presupuesto a este tipo de proyectos, y otro 13% emplea tan solo un 5%. Por otro lado, solo un 5% afirma no tener un porcentaje definido.
Inteligencia artificial en el sector energético
La aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) está transformando el sector energético, optimizando tanto los procesos operativos como la gestión de recursos. Al ser preguntados por las principales ventajas de la IA, el 55% de las empresas energéticas encuestadas opina que, en primer lugar, se encuentra el análisis de datos (55%), en segundo lugar, el análisis predictivo (53%), seguido de la generación de ideas y la automatización de tareas administrativas (35%).
Según el VI Barómetro de Ayming, un 30% de las empresas del sector destina hasta un 10% de su presupuesto a la Inteligencia Artificial, mientras que el 18% destina hasta el 20% a este tipo de proyectos. De este modo, la inteligencia artificial se posiciona como una herramienta imprescindible para acelerar la transición hacia un modelo energético más limpio y competitivo.
Por otro lado, la innovación sostenible también se ha convertido en estratégica para las compañías energéticas. El 18% de las empresas energéticas destinan hasta un 20% de su presupuesto a proyectos de innovación sostenible, reflejando la creciente importancia de estas iniciativas en el sector. Las principales áreas de inversión de las empresas de energía con objetivo sostenible son, en primer lugar, la reducción del consumo energético (63%), seguida por el desarrollo de tecnologías de energías renovables (45%) y la reducción de emisiones (38%).
"El sector energético desempeña un papel clave en la transición hacia un modelo industrial más sostenible. La Innovación en este ámbito no solo es esencial para cumplir con las normativas y reducir el impacto ambiental requerido por Europa, sino también para aprovechar las oportunidades de crecimiento económico y posicionar España y las empresas españolas como líderes en este ámbito, puesto que disponemos de unas condiciones inmejorables para ello. Si somos capaces de aprovechar esta oportunidad, dependerá en gran parte la mejora sustancial de la competitividad industrial y española", asegura María Sanz de Galdeano, la directora de innovación de Ayming España. En lo que respecta a los principales factores que lleva a las compañías a invertir en Innovación sostenible se encuentra, en primer lugar, el ahorro de costes y la mejora de la eficiencia (53%), reputación de marca y marketing (50%) y la responsabilidad social de las empresas (48%).
Deducciones fiscales
Respecto a cómo las energéticas financian sus proyectos, el 55% de las empresas del sector energético recurre a los fondos propios como principal fuente de financiación, mientras que un 50% afirma recurrir a Deducciones Fiscales en I+D+i, en lo que observamos una tendencia mayor a la autofinanciación. Las ayudas públicas a la Innovación también tienen un peso significativo, siendo aprovechadas por el 48% de las compañías.
"El acceso a recursos financieros públicos es crucial para garantizar el desarrollo de proyectos innovadores, especialmente en sectores estratégicos como el energético. Concretamente las ayudas públicas permiten a las empresas impulsar iniciativas que, de otra manera, no serían viables por el alto coste económico que conlleva su puesta en marcha. En ese sentido, los fondos públicos destinados a este tipo de proyectos sostenibles es cada vez mayor, lo que confirma la apuesta como país en el modelo de industria sostenible", ejemplifica Manuel Mestre, director del área de ayudas de Ayming España.
A medida que las empresas del sector energético intensifican sus esfuerzos en Innovación, el papel de la financiación se consolida como un elemento clave para garantizar el éxito de estas iniciativas. "Maximizar el uso de ayudas públicas, lideradas por IDAE, no solo es una oportunidad para impulsar proyectos innovadores dentro del sector a través de la financiación, permitiendo a las compañías disponer de más oxígeno para abordar el cambio hacia modelos más sostenibles y competitivos que impulsen el progreso empresarial, sino también una estrategia financiera inteligente para posicionar España como líder en la transición energética. Algo clave para nuestro posicionamiento en Europa", explica Mestre.