- Hoy se celebra el Día del Orgullo Rural y su entidad lleva ese adjetivo hasta en su nombre: Caja Rural de Aragón. ¿Qué significa para ustedes ser rural?

- Para nosotros lo es todo. Significa una forma de entender la vida. La palabra rural, ese adjetivo, siempre ha llevado implícito el medio ambiente, la ecología o la sostenibilidad. Ahora rural también significa tecnología, innovación, emprendimiento y sobre todo y como estamos viendo en estos tiempos de pandemia, lo rural es salud física y mental. Esto lo observamos sobre todo en los jóvenes y en las parejas que vuelven a pensar en vivir en el medio rural como opción de futuro y de calidad para sus vidas. En Caja Rural de Aragón estamos muy orgullosos de que lo Rural esté en nuestro ADN.

- El medio rural en Aragón arrastra desde hace años una tendencia demográfica negativa, aunque están surgiendo iniciativas para frenar esa despoblación. Cómo entidad financiera ¿cuál es su papel para contribuir a detener este fenómeno?

- Efectivamente, cada día hay más personas que apuestan por lo rural. Lo estamos viendo en los últimos meses. Es un proceso que posiblemente haya acelerado el covid-19. Observamos cómo hay poblaciones en el Sobrarbe como Aínsa o en Los Monegros como Robres que crecen de forma importante. Caja Rural de Aragón está firmemente comprometida con el territorio y con las personas. Actuamos como dique de contención financiando proyectos que ayudan a generar riqueza, a contar con nuevos puestos de trabajo y a fijar población en nuestros pueblos. Cerca del 50% de nuestra financiación se concede al medio rural, al sector primario.

- La crisis del covid-19 señaló a las entidades financieras como servicios esenciales, aunque muchos municipios ni siquiera cuentan con oficinas bancarias. Sin embargo, ustedes siguen teniendo una amplia red por el territorio.

- Nosotros nacimos en el medio rural. Somos una cooperativa. Una cooperativa financiera. Estuvimos en el pasado, lo estamos ahora y estaremos en el futuro junto a las personas en el territorio. Es nuestra razón de ser. Actualmente el 64% de nuestras oficinas están en localidades de menos de 2.000 habitantes y seguimos presentes con oficina en poblaciones de menos de 500 empadronados. Esto solo es posible sacrificando una parte de nuestra rentabilidad económica y poniendo en valor la rentabilidad social que aportamos a la sociedad estando junto a las personas, para asesorarles, ayudarles y a su lado alcanzar un futuro mejor.

- Son una cooperativa de crédito especializada en el sector agrario que es el principal motor de la economía rural en la comunidad. Conocerán muy de cerca sus problemas y las demandas de su población.

- Por supuesto. Estamos especializados en el sector agrario pero cada vez más también somos referente de servicio y asesoramiento para muchas personas en el ámbito urbano. Solo tenemos que ver cómo los jóvenes de la ciudad nos eligen como su entidad financiera por todo lo que representamos y lo que somos. En el medio rural trabajamos junto a las cooperativas y a los emprendedores del sector primario. Conocemos sus dificultades y les ayudamos a resolver sus problemas.

- También son una ayuda para agricultores y ganaderos a la hora de tramitar las declaraciones de la PAC o los partes de siniestro ante pérdidas en las explotaciones por desastres naturales. Háblenos de ello.

- Contamos con un gran equipo de profesionales en toda nuestra red de oficinas. Muchos de ellos son hijos o hijas de agricultores y/o ganaderos. Asesoramos en la tramitación de la PAC y nos tienen a su lado en los momentos complicados cuando hay un incidente provocado por la climatología para cumplimentar lo antes posible el parte de siniestro. Casi una de cada dos subvenciones de la PAC domiciliadas en Aragón, llegan a una oficina del Grupo Caja Rural. Esta confianza de los agricultores y ganaderos reafirma el trabajo que realizan nuestros profesionales en las tres provincias.

- Al inicio de esta crisis sanitaria, también habilitaron líneas de crédito con disponibilidad inmediata para este sector. ¿Cómo han funcionado?

- Muy bien. Desde el primer momento inyectamos liquidez a todas las personas que necesitaran de una ayuda para paliar las primeras consecuencias negativas provocadas por la crisis sanitaria. Se han realizado numerosas operaciones, tanto de préstamo como de crédito, y no han parado los nuevos proyectos para desarrollar explotaciones agrícolas o nuevos regadíos con los que seguir creando riqueza en el territorio. Todos mis compañeros y compañeras han estado trabajando intensamente y de forma destacada para ayudar y paliar los efectos financieros del coronavirus.

- Más allá de su papel como entidad financiera, también cuentan con una fundación que se preocupa, entre otras cosas, por hacer llegar una oferta cultural variada y de calidad al medio rural.

La Fundación Caja Rural de Aragón está muy comprometida con la cultura, la acción social y con el desarrollo del medio rural. En este año tan complicado, ha logrado llevar a numerosas poblaciones actividades de calidad. Acerca a las personas, de forma gratuita, una variada oferta cultural y ha intensificado los programas sociales. Por ejemplo, conjuntamente con la AECC realizó durante los últimos meses una gran acción de recaudación de fondos para dedicarlos a la investigación de esta enfermedad. Devuelve a la sociedad una parte de lo mucho que las personas dan a Caja Rural de Aragón con su compromiso y confianza en esta entidad 100% aragonesa.