El día 29 de septiembre, los alumnos y alumnas de 2º de ESO del Colegio Romareda de Zaragoza pasamos un gran día de convivencias. El horario escolar permaneció igual y nos tocó madrugar, por la mañana estábamos en clase ansiosos por empezar las actividades. Iniciamos el día con una oración y nos dirigimos a la Parroquia de Santa Mónica donde transcurriría una gran parte de la jornada. Al llegar, cada una de las clases fue a una sala.

Lo primero realizado fue el juego de las sillas, escuchábamos música y cuando esta paraba todos debíamos sentarnos en una silla, quién no consiguiera una (había un número inferior de sillas a la cantidad de competidores) quedaba eliminado. En el caso de mi clase, hubo una gran confusión porque no sabíamos quién fue el ganador, así que proclamamos a ambos ganadores.

Acto y seguido, realizamos una ficha que hablaba sobre las capas que tienen las personas por miedo a ser juzgadas y por ello no son ellas mismas. Todo a través de una lectura comprensiva sobre cebollas que debían esconderse mediante capas por una extraña razón y por eso lloramos cuando las cortamos, porque ellas querían ser libres.

El alumnado de todas las clases compartió una jornada de juegos y actividades. COLEGIO ROMAREDA

Después, descansamos y nos tomamos un pequeño tentempié ya que luego nos tocaba una gran merendola. Por último, rellenamos un folio respondiendo a un cuestionario que trataba de nuestras aficiones, sentimientos… Luego leímos algunas y debíamos adivinar de quién era, sorprendentemente nos conocíamos mejor de lo que pensábamos. Teníamos una actividad que quedó pendiente pues no nos dio tiempo a llevarla a cabo.

En la segunda parte del día fuimos al Parque Grande José Antonio Labordeta, donde disfrutamos de la merendola, algunos bailaron otros jugaron a fútbol o dialogaron. Regresamos al colegio y todos fuimos a nuestras casas con una nueva experiencia vivida. Fue un día muy divertido.