Luisa Fernanda Rudi marcó el ritmo de debate en el primer día de la campaña electoral. Rescató una de las propuestas que formuló en el pasado debate del estado de la comunidad: la de reducir el número de diputados en las Cortes. Salieron de inmediato los partidos de la izquierda para rechazar la propuesta, como ya hicieron hace unos meses, ante la nueva insistencia de la candidata popular.

Consideran que es una grave limitación democrática y atenta contra la tradicional pluralidad ideológica aragonesa, y que así se refleja en un Parlamento que siempre ha estado compuesto por más de cuatro partidos, cinco en ocasiones y todo apunta que a partir de junio estará formado por incluso siete. Muy diferente de lo que sucede en otros hemiciclos autonómicos, en especial los menos periféricos, en los que el bipartidismo o, como mucho con una representación simbólica de un tercer partido, ha sido la nota habitual en tres décadas largas de autonomía.

INTENCIONES La lideresa del PP saltó al ruedo el primer día de campaña presentando un programa electoral desmenuzado al detalle --algo que no pueden decir todos los partidos, en especial los recién creados y de los que, entrada la campaña, lo van desgranando con cuentagotas y sobre la marcha--. Pero en la presentación, en un céntrico hotel zaragozano, y tras la larga noche de la pegada de carteles, la candidata popular dejó claras sus prioridades y sobre todo por dónde quiere encauzar la campaña. Entre las medidas de regeneración puso sobre el tapete la reducción de diputados. No entró en detalles, pero garantizó que se hará guardando la proporcionalidad y representación de todos los partidos.

Convertir la propuesta electoral en realidad conllevará una modificación del Estatuto (que incluso prevé la ampliación a 73 escaños en lugar de los 67 actuales) y evidentemente no tendría efectos hasta la próxima legislatura, a partir del 2019. "Se trata de una demanda de la sociedad, que cree, no sé si con acierto, que hay demasiados representantes políticos. Así que apostamos por hacerlo sin que por ello se tenga que perder la pluralidad parlamentaria", explicó la candidata.

La medida, con la consiguiente modificación del Estatuto, no está en manos de Rudi. La presidenta de los populares es consciente de que no contará con suficiente mayoría parlamentaria como para adoptar decisiones de este calado. Así que abogó por el pacto con el resto de fuerzas políticas que conformarán la nueva Cámara para realizar los ajustes necesarios. Algo que, como ella mismo sabe, es muy complicado. Tan solo Ciudadanos apoyaría esta medida, a tenor de lo oído de esta formación a nivel nacional, ya que ha hecho de la simplificación de las estructuras administrativas y políticas gran parte del leiv motiv de su ideario. Algo que también comparte UPD.

El resto no quiere ni oír hablar de eso. En realidad, la reducción de diputados apenas conlleva ahorro económico, pero sí reduce la representatividad política. Javier Lambán fue preguntado ayer por la propuesta --nada nueva-- de los populares. Fue muy escueto pero muy claro: "La reducción de diputados más conveniente para los intereses de la comunidad autónoma sería la de la propia Rudi en la próxima legislatura". Para los socialistas, esta medida supone unalimitación de la democracia que "está absolutamente en el ADN ideológico y político" de Rudi y consideró que si pudiera limitar el Parlamento un solo diputado -- el de Rudi-- "daría ese paso sin titubear".

Para el candidato de Chunta Aragonesista a la Presidencia, José Luis Soro, el objetivo de Rudi es claro y sencillo: eliminar el pluralismo. "Si fuera por la presidenta el Parlamento estaría cerrado, pero no le queda más remedio que abrirlo y lo utiliza en beneficio del PP y el PAR". Incluso, insinuaron que cuantos menos cargos públicos tenga bajo su responsabilidad, menos casos de corrupción salpicarán a su partido.

Izquierda Unida también está "radicalmente en contra" de reducir el número de diputados autonómicos porque, en su opinión, no reflejará la pluralidad de la sociedad aragonesa. Así lo señaló también la candidata de Izquierda Unida a la Presidencia de Aragón, Patricia Luquin. De hecho, la reducción de diputados afectaría --aunque un estudio que realizó el Ejecutivo popular asegura que no es así-- a las minorías. Por ello, y en un momento en el que la horquilla de partidos se amplía, cerrar las puertas es la mejor garantía de evitar luego pactos que no son del gusto del que gobierna.