Las instalaciones del Centro Deportivo Municipal La Granja fueron un año más el escenario de las IV Jornadas Deportivas de Personas sin Hogar en las que participaron más de 120 personas. La sesión celebrada el pasado 16 de mayo comenzó con ejercicios de calentamiento, antes de poner en práctica disciplinas deportivas como fútbol, baloncesto y tenis de mesa. Este año, como novedad, la Federación Aragonesa de Petanca, además de donar material a la Coordinadora de Centros y Servicios de Personas sin Hogar de Zaragoza, enseñó a los usuarios a practicar este deporte tradicional.

Durante la jornada otras actividades que complementaron la oferta deportiva, como una divertida clase de zumba y juegos que preparó el voluntariado de las entidades miembros de la coordinadora. El encuentro contó con la colaboración de Cruz Roja Juventud y del Banco de Alimentos, que se encargó del avituallamiento a los participantes con un tentempié.

Con esta actividad se pretendía concienciar y sensibilizar de la importancia de ocio y tiempo libre saludable a los usuarios, utilizando el deporte como una herramienta de integración social que transmita valores de solidaridad, trabajo en equipo, participación, respeto, convivencia y salud. Con esta acción se quiso dar visibilidad a un colectivo que se encuentra en situación de extrema vulnerabilidad.

En el último censo de Cruz Roja, en el que colaboraron miembros de todas las organizaciones, se localizaron a 120 personas durmiendo en parques, bajo puentes o refugiados en el interior de cajeros de bancos o cajas. Si a este número de sin techo añadimos los que utilizan alojamientos temporales de entidades y recursos sociales, se estima que alrededor de 500 personas carecen de hogar en Zaragoza.

La coordinadora está compuesta por 10 entidades sociales que ofrecen servicios a personas sin hogar: Centro Social San Antonio, Cáritas Diocesana de Zaragoza, Cruz Roja, Fundación La Caridad, Hermandad del Refugio, Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, parroquia del Carmen, centro de día y consignas de San Blas, Cruz Blanca y la colaboración del albergue municipal de Zaragoza.