Mejorar los hábitos alimenticios de menores de familias vulnerables, asegurando la ingesta de proteínas que proporcionan la ternera, el pollo y el pescado. Ese es el objetivo del nuevo proyecto piloto Comer para crecer, que ponen en marcha el Ayuntamiento de Zaragoza, la asociación YMCA y CaixaBank, a través de una aportación económica de la Fundación la Caixa, con la colaboración de tres comercios de proximidad del Mercado Delicias.

La iniciativa, que incluye además talleres formativos sobre alimentación impartidos por YMCA, puede ser un complemento de las ayudas de urgente necesidad que los servicios sociales municipales destinan a cubrir las necesidades básicas de alimentación de la población vulnerable. A menudo, las familias invierten este tipo de ayudas en alimentos no perecederos, más baratos que el producto fresco. Solucionar esa carencia es el objetivo de este proyecto socioeducativo piloto, que se ha iniciado con 25 familias de Delicias, con la vocación de ampliarse a otros barrios y a más población.

Para esta primera prueba, el proyecto cuenta con un presupuesto de 47.175 euros, de los que el ayuntamiento aporta 9.000, CaixaBank 12.000 euros e YMCA otros 26.175, en concepto de personal y alimentos. Los comercios adheridos son Pollería Julia, Carnicería Villa y Pescados y mariscos Charo y Fernando.

Las familias beneficiarias, que han sido seleccionadas por YMCA y los servicios sociales municipales atendiendo a su vulnerabilidad, pueden adquirir los lotes de carne, pollo y pescado mediante la aplicación Encantado de comerte. Cada familia cuenta con unos cupones, en función del número de componentes, calculados según los gramos semanales de proteínas recomendados para cada edad.

Cada semana, pueden recoger sus lotes de carne y pescado en los comercios colaboradores usando la app, que proporciona una trazabilidad inmediata del proyecto. De este modo, se puede evaluar el resultado y solucionar posibles incidencias inmediatamente. A la vez que se fomenta el consumo en el comercio de proximidad, se evita la estigmatización, ya que cualquier usuario emplea esa misma app con sus propios fondos.