Un abogado, una activista del feminismo y los derechos LGTBIQ+ y dos periodistas, tres de ellos colombianos y una saharaui, son perseguidos en sus lugares de origen por su defensa de la libertad y la justicia social. Y ahora, durante dos meses, «vamos a poder brindarles un contexto seguro y un espacio en el que poder descansar y alejarse de su situación de riesgo, pero al mismo tiempo visibilizar y denunciar las vulneraciones a los derechos humanos en su país», explica Valdivia Moutawali, técnica de la Fundación Mundubat.

33 Jesús Maestro, Valdivia Moutawali y Cristina Hernández colaboran en la acogida. | ANDREEA VORNICU

Esta oenegé, con el apoyo del Comité de Solidaridad Internacionalista de Zaragoza (CSIZ), el Observatorio Aragonés para el Sáhara Occidental y Umdraiga Amigos del Pueblo Saharaui en Aragón, gestiona Aragón Protege, la primera edición del programa de acogida a personas defensoras de derechos humanos del Gobierno autonómico. Y Santiago Salinas, María Fernanda Yath, Eliécer Cáceres y Naziha El Khalidi son sus primeros participantes.

El programa busca proteger a estas personas, así como a las organizaciones y comunidades a las que representan, y fortalecer su labor con formación y mediante el establecimiento de alianzas con otras entidades de defensa de los derechos humanos. «Intentamos que conozcan diferentes organizaciones sociales de base de Aragón y que se relacionen con partidos políticos, sindicatos e instituciones, para crear redes de apoyo y hermanamiento», señala Cristina Hernández, del CSIZ.

«Lo hacemos con la esperanza de que ese apoyo y ese conocimiento les sirva de protección cuando vuelvan a sus países», apunta Jesús Maestro, miembro de Umdraiga. «Al menos, quienes violan derechos allá se lo pensarán dos veces antes de actuar contra ellos, porque saben que aquí no nos vamos a quedar de brazos cruzados. Somos conscientes de que esto no los blinda del todo, pero los protege».

Además, gracias a su participación en encuentros con el público y los medios de comunicación, los cuatro activistas están aprovechando su estancia en Zaragoza «para que Europa conozca la situación que estamos atravesando», subraya el periodista Eliécer Cáceres. «Programas como Aragón Protege son fundamentales para seguir denunciando lo que el pueblo saharaui está padeciendo bajo la ocupación marroquí», sostiene su colega Naziha El Khalidi. «No es lo mismo que lo contemos nosotros a que lo haga alguien de allí que ha sufrido en primera persona la represión», apostilla Maestro.

Las entidades implicadas en Aragón Protege acostumbran a invitar a activistas para que narren de primera mano la vulneración de derechos en sus países de origen. «Pero el hecho de comprometer a los gobiernos nacional y autonómico a través de este programa es un paso más, le da más entidad a la acción», opina Maestro.

«El simple hecho de que vengan a España con un visado especial, que implica el reconocimiento de las autoridades a su labor como defensores de derechos humanos, les otorga un respaldo político. No es lo mismo que si vinieran con un visado de turistas», concluye Moutawali.