Cuando el Grupo Térvalis decidió poner en marcha su fundación, dos fueron los principales objetivos que guiaron este salto en la gestión de su responsabilidad social corporativa: utilizar su potencial generador de empleo para colectivos vulnerables y poder ayudar a Teruel en aquellos proyectos culturales, artísticos o sociales generadores de valor para la provincia.

La creación de varios centros especiales de empleo fue el primer paso. Y, desde el pasado mes de noviembre, el círculo se ha cerrado con la apertura de la tienda Simiente de Teruel. Este establecimiento se encuentra al final de todo el proceso productivo de estos centros, que dan empleo a 110 personas con discapacidad o en riesgo de exclusión. En la tienda puede adquirirse aquello que producen: cosmética, aromaterapia, ropa y complementos exclusivos de la firma Reiite, azafrán…

Pero no solo eso. Como su propio nombre indica, Simiente de Teruel es un proyecto que nace de esa tierra, y gracias a lo que ella le proporciona puede crecer y dar fruto. Así, se erige como un escaparate de la economía de proximidad y para «los productos de la provincia que apuestan por la calidad», señala Mamen Barona, responsable de la tienda. Jamón de Teruel, aceite del Bajo Aragón, dulces artesanos, elaborados cárnicos, como cecina y embutidos, nueces y aceite de nuez de Montalbán, vino del Matarraña o trufa (en temporada) son algunas de las delicias con las que hacen bandera.

El establecimiento tiene una ubicación privilegiada, junto al mausoleo de los Amantes de Teruel. Por lo tanto, son muchos los turistas que pasan por ahí, y también los que no son capaces de resistirse a probar alguna de estas exquisiteces. Pueden hacerlo directamente y sin esperar a volver a casa, en la terraza de la propia tienda, que abre ininterrumpidamente, de lunes a domingo, de 10.00 a 21.00 horas. Y, de paso, pueden llevarse algún recuerdo de la ciudad, como las populares sudaderas con el ‘skyline’ turolense estampado. Es importante la labor de promoción que Simiente de Teruel hace de los mejores productos de la tierra. Sin embargo, no es su principal cometido. La tienda es un auténtico espacio de visibilización de la integración social y laboral y de promoción de la igualdad de todas las personas.

Al igual que los centros especiales de empleo que suministran buena parte de la mercancía, uno de los objetivos de este comercio es la inclusión laboral de las personas con discapacidad. Tres de sus cuatro empleadas «tienen capacidades diversas», explica Barona. Su buena labor demuestra que, «aunque tengan alguna de sus capacidades menos desarrollada, potencian otras, y son unas trabajadoras maravillosas», asegura. «Todo el mundo está capacitado para trabajar», apostilla.

Mamen comenta que, entre todas las gamas de referencias que hay en la tienda, la estrella son los productos cosméticos y de aromaterapia hechos con lavanda. Su origen está en uno de los centros especiales de empleo de la Fundación Térvalis. El proyecto arrancó hace siete años con el cultivo de la planta aromática, y hoy ya completan todo el proceso, desde la destilación del aceite esencial hasta la fabricación de las colonias, saquitos de aroma, ambientadores, jabones o geles hidroalcohólicos, culminando con su venta.

La última incorporación a este listado han sido las velas. Pero, en Simiente de Teruel, la lavanda no solo se huele, también se paladea. Uno de los productos más originales a la venta es un chocolate aromatizado con esta flor, creado en exclusiva por la prestigiosa pastelería turolense Muñoz.