LA AUDIENCIA considera probado que el etarra José Ignacio Guridi Lasa, al que la sentencia llama "sicario", recibió la orden de ETA de "matar al periodista" José Luis López de Lacalle. Y que en unión de otros dos terroristas averiguó el domicilio de su víctima en Andoain (Guipúzcoa) y le asesinó el 7 de mayo del 2000, cuando el periodista acudía a una cafetería después de comprar los periódicos.