EL PROTOTIPO del futuro avión de combate europeo, que se estrelló el 21 de noviembre en un vuelo de prueba, sufrió un "cambio brusco de presión" que provocó el apagado de sus dos motores, según las primeras investigaciones del siniestro. El consorcio europeo encargado de la producción del Eurofighter explicó que se van a sustituir dichos motores por otros más modernos.