Los presidentes de la Comunidad Valenciana y de Murcia aprovecharon el congreso de los populares para reiterar sus protestas por el freno del trasvase del Ebro. Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel incluso aseguraron que en cuanto el Partido Popular vuelva a gobernar se impulsará de nuevo esta transferencia hidráulica. Gustavo Alcalde no consideró estas afirmaciones como una amenaza: "Han dicho lo mismo que venimos diciendo: que el agua sobrante se puede desviar a Levante".