La Audiencia Provincial de Málaga denegó ayer la excarcelación de dos de los empresarios imputados en la trama de corrupción municipal de Marbella, Carlos Sánchez y Andrés Liétor, al ser acusados de realizar pagos "de forma opaca" por más de 5 millones de euros para sacar adelante sus proyectos urbanísticos. La fiscalía entiende que su puesta en libertad supondría un riesgo para la investigación ante el peligro de "ocultación de pruebas".
Su defensa insiste en que "no pagaron a los concejales del ayuntamiento" por sus actuaciones urbanísticas. Y negó que existan pruebas que los vinculen con la trama orquestada por Juan Antonio Roca. Mientras su abogado presentaba el recurso, Liétor era ingresado en el hospital al sufrir una crisis diabética.
En los juzgados coincidió con Isabel García Marcos, que acudió en persona a entregar su pasaporte. La exteniente de alcalde subrayó la dureza de su estancia en prisión --"ríete tú de Guantánamo"-- y proclamó que "los malayos somos los presos políticos que en España hemos creado una tapadera estupenda de vergüenzas ajenas". La investigación continuará hoy con la declaración ante el juez de Julián Muñoz.
