Madrid El presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, expresó ayer su complicidad con la Asociación de Ex Presos y Represaliados Políticos Antifranquistas (AERP), pero no dudó en expresar con su habitual rotundidad su rechazo a la exhibición de una bandera republicana. Fue en el Congreso, en un acto organizado por la AERP, cuando uno de los 300 asistentes, mientras Bono pronunciaba su discurso ante el auditorio, se paseó por la Cámara baja con la bandera tricolor. Bono, que en esos momentos ensalzaba la labor de la asociación, quiso dejar las cosas claras: "Con la misma fuerza con la que estoy defendiendo lo que pienso, (...), no puedo aceptar manifestaciones que no son legales en este momento". Justo después de su declaración, se pudo escuchar un "Viva la república" por parte de otro de los asistentes en el Congreso.
