Yolanda Barcina logró ayer la reelección como presidenta de Unión del Pueblo Navarro (UPN) tras imponerse, por escasa diferencia de votos, a Alberto Catalán. Pese a que no faltaron momentos de tensión, como cuando el sector perdedor comprobó que, por un fallo técnico, había habido más votos que votantes, finalmente ambos sectores apostaron por afrontar "unidos" el complicado momento que atraviesa el partido, al frente de Navarra en minoría y sin ningún apoyo. La duplicación de algunos votos no afectó a la elección de los cargos, según UPN.

Junto a Barcina, que cosechó un 51% de los votos frente al 47% de Catalán, fueron elegidos dos miembros de su equipo para los cargos de vicepresidente y secretario general, por lo que su posición interna salió muy reforzada. Más complicado lo tiene como presidenta de la Comunidad Foral, ya que la oposición demanda insistentemente elecciones anticipadas y las relaciones con su socio habitual, el PSN, están rotas. La presidenta también está siendo muy criticada tras conocerse que cobró dietas dobles e incluso triples por asistir a reuniones de Caja Navarra.

UPN gobierna la Comunidad Foral ininterrumpidamente desde hace 17 años.