Los agentes antidisturbios de la Unidad de Intervención Policial (UIP) del Cuerpo Nacional de Policía lucirán su número de identificación en la espalda y en grandes dimensiones. El Ministerio del Interior ha confirmado que está ultimando una modificación sobre la identificación de estos agentes en manifestaciones después de que la Defensora del Pueblo así lo recomendase en su último informe anual tras recibir quejas de colectivos y ciudadanos, sobre todo tras el 25-S.
Fuentes de Interior confirmaron a la agencia Efe --pero sin dar fecha alguna-- que, a falta de ultimar algunos detalles, se ha tomado la decisión de que el tamaño del número sea mucho mayor, de manera que se pueda ver desde una distancia media, y que los agentes lo llevarán probablemente en la espalda.
La visibilidad de los miembros de la UIP sería así similar a la de los agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra, quienes, según anunció el pasado día 14 la Consejería catalana de Interior, lucirán en la espalda de su uniforme un código alfanumérico que permitirá que sean identificados, aunque este código no será su número profesional.
La Generalitat aprobó la fórmula de una combinación de nueve números y letras impresas sobre un velcro de 11,6 centímetros de alto por 27 de largo que se colocará en la parte trasera del chaleco que llevan los antidisturbios de los Mossos.
La misma solución se ha buscado para los policías nacionales. En la actualidad, los agentes lucen sus números de identificación en el pecho, también adherido con un velcro, pero con unas dimensiones difícilmente visibles más allá de la distancia de respeto (1,20 metros).
Tal y como ha reconocido ahora el exsecretario de Estado de Seguridad Ignacio Ulloa, cuando los antidisturbios de la policía nacional tienen que llevar a cabo alguna intervención se equipan con los chalecos antitrauma, que no son individuales, sino colectivos y por lo tanto no es posible que figure en ellos el número de cada agente.
La prenda de protección asimismo tapa el número del pecho por lo que los policías son difícilmente identificables en un momento de acción propio de una manifestación.
Desde el Ministerio del Interior han manifestado en numerosas ocasiones que se estaba estudiando desde el inicio de la legislatura la manera de mejorar la identificación de los antidisturbios en las grandes concentraciones.
LA GUARDIA CIVIL Las reclamaciones fueron recogidas por la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, en su último informe anual, e incluía dicha recomendación a la Secretaría de Estado de Seguridad. Además pedía que se estableciesen "las mismas dimensiones para el Cuerpo de la Guardia Civil (...) al objeto de que se permita su fácil lectura por los ciudadanos desde una distancia prudencial que faculte la debida identificación de los agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, incluidos los miembros de las UIP".
