El Rey ha superado con éxito su nueva operación de cadera. "Todo ha sido afortunadamente bueno", ha explicado el cirujano Miguel Cabanela, que se ha desplazado de Estados Unidos para intervenirle. Aún así, la operación para atajar la infección que sufría en la cadera izquierda no ha podido efectuarse de una sola vez y el Monarca deberá volver al quirófano dentro de ocho semanas, es decir, a finales de noviembre.

En la tarde-noche del martes, el equipo médico dirigido por Cabanela le ha retirado la prótesis infectada y le ha colocado una temporal, que será retirada en la próxima intervención. Durante este tiempo, el Monarca recibirá antibióticos por vía intravenosa y podrá retomar sus actividades en Zarzuela, pero no acudir a actos que le requieran mucho esfuerzo, como el desfile con motivo del 12 de octubre.

Juan Carlos permanecerá hospitalizado entre cuatro y siete días. Mañana miércoles se podrá levantar, si se encuentra con fuerza, y empezará a caminar con muletas "tan pronto como se sienta confortable", según Cabanela.

"Todo ha ido como la seda", ha resumido el Príncipe después de la intervención, que comenzó pocos minutos antes de las nueve de la noche y se ha prolongado hasta las 23.30 horas. Durante este periodo, la Reina ha permanecido en el hospital, junto con la infanta Elena y los Príncipes de Asturias, que fueron los últimos en llegar al centro hospitalario, poco antes de las once de la noche.