Tras el revuelo ocasionado el martes en el Congreso por el cambio de versión del portavoz socialista, Antonio Hernando, en solo 45 minutos, a cuenta de la posición del PSOE respecto de la imputación de Manuel Chaves y José Antonio Griñán en el Supremo por el 'caso ERE', el secretario general, Pedro Sánchez, ha asegurado que si se les imputa algún delito a los expresidentes andaluces cumplirá su "palabra" y les pedirá que dejen el escaño.

"Desde luego voy a cumplir con mi palabra cuando se produzca esa imputación con delito, si es que se produce, el PSOE actuará y por lo tanto cumpliré con mi palabra", ha prometido Sánchez este miércoles en los pasillos del Congreso.

Asimismo, el líder socialista ha negado que el partido haya cambiado su criterio a la hora de exigir responsabilidades. "No se ha rebajado el listón", ha afirmado. No obstante, el propio Sánchez manifestó el pasado diciembre en una entrevista en el programa 'Salvados" que si Griñán y Chaves eran imputados tendrían que dejar el escaño. La misma tesis matuvo la andaluza Susana Díaz en noviembre, aunque pocos días después matizó que esta medida debía tomarse cuando el tribunal les acusara de algún comportamiento delictivo.