El PP vetó con su mayoría absoluta en el Senado una moción del PSOE --que recogía parte del pacto alcanzado con Ciudadanos-- que proponía suprimir el aforamiento del que disfrutan los parlamentarios estatales y autonómicos. Pero, conscientes de que la ciudadanía no comparte que casi 2.000 políticos (además de cinco miembros de la Familia Real y en torno a 15.000 miembros de la judicatura; en total 17.621 personas en España) gocen del privilegio de ser juzgados por un tribunal diferente a la mayoría de la ciudadanía, los conservadores ofrecieron a los socialistas crear, en el seno de la Comisión Constitucional de la Cámara alta, una ponencia para limitar y acotar esta prerrogativa.

El PSOE rechazó la "desconsoladora" propuesta de crear una comisión de estudio y de ahí que el PP votara en contra de la moción.

Sin embargo, fuentes del PP señalan que el partido es consciente de que la sociedad demanda nuevas medidas de regeneración democrática, y que decisiones como la de blindar el aforamiento de Rita Barberá al incluirla en la comisión permanente del Senado --que permite el privilegio aun si se disuelven las Cortes-- les hace electoralmente "mucho daño". De ahí que los conservadores anunciaran que presentarán una moción para crear dicha ponencia. Asimismo, tienen en mente incluir el compromiso de limitar los aforamientos en el programa electoral si se repiten las elecciones. Ambas medidas darían su fruto a largo plazo. Pero eliminar la dispensa para políticos requiere de una reforma de la Constitución y, por tanto, ahora o en el futuro, previsiblemente necesitará de los votos del PP.

Rita Barberá, por cierto, siguió el debate desde su escaño sin inmutarse, y desde allí escuchó al portavoz socialista señalar, por ejemplo, que la ciudadanía está "harta" de casos como el de Imelsa, que investiga la financiación ilegal y el presunto blanqueo en el PP valenciano. La oposición no hizo demasiada sangre sobre la polémica situación de la exalcaldesa, que aún no está imputada debido a su aforamiento, como se temía el PP.

El PSOE lamentó, en términos generales, que el Partido Popular, "cercado por la corrupción", proponga "ponencias" y no "hechos". H