Abucheos a Carmena en el Día de las Fuerzas Armadas

Los reyes Felipe y Letizia presidieron los actos centrales del Día de las Fuerzas Armadas, un acto al que llegaron en medio de vivas y aplausos por parte de algunos de los cientos de ciudadanos y turistas que presenciaron el homenaje a los soldados caídos en acto de servicio y un breve desfile en el madrileño Paseo del Prado. Fue el primer desfile de conmemoración de las Fuerzas Armadas con un Gobierno en funciones. Durante su llegada, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, fue abucheada con gritos de "vaya alcaldesa", "fuera, fuera", "si tuviera vergüenza, no estaría aquí" o "dimisión".

Al acto también asistieron el ministro en funciones de Defensa, Pedro Morenés, y el del Interior, Jorge Fernández Díaz, así como el jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra (Jeme), general Jaime Domínguez-Buj; el jefe de Estado Mayor del Ejército del Aire (Jema), general Francisco Javier García Arnáiz; el jefe de Estado Mayor de la Armada (Ajema), almirante general Jaime Muñoz-Delgado, y el director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa.

Entre las otras autoridades que acudieron destacaron la delegada del Gobierno en Madrid, Concepción Dancausa, y la consejera de Economía, Empleo y Hacienda de la Comunidad de Madrid, Engracia Hidalgo.

Los Reyes llegaron a la plaza de la Lealtad, junto a Neptuno, pocos minutos después de las 12.30 horas. Felipe acudió ataviado con el uniforme de capitán general del Ejército del Aire y, con la bengala de jefe supremo de las Fuerzas Armadas, pasó revista a las tropas. El Monarca depositó una corona de laurel en el monumento conmemorativo. Un momento después se produjo un disparo de salvas al tiempo que unos reactores sobrevolaron el centro de Madrid conformando los colores de la bandera española con sus estelas.

Una vez finalizó el acto conmemorativo, el jefe del Estado presidió un breve desfile militar en el que tomaron parte 734 efectivos de los tres ejércitos, de la Guardia Civil y de la Guardia Real. Poco antes de que se iniciara el acto en recuerdo de los caídos, se había procedido al izado solemne de la bandera española de 290 metros cuadrados de la Plaza de Colón en una convocatoria presidida por el jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Fernando García Sánchez. Tras el desfile castrense, Felipe y Letizia se desplazaron al Palacio de Oriente para ofrecer la tradicional recepción a las autoridades.