El varapalo del Tribunal Constitucional al estado de alarma que decretó el Gobierno ha dado munición al PP. Pablo Casado ha exigido a Pedro Sánchez que construya un "marco legal" que permita contener los contagios y, nuevamente, le ha tendido la mano para sacar adelante el ya conocido como 'plan b' de los conservadores, una modificación de la Ley Orgánica de Salud Pública de 1986 que podría estar aprobada en 15 días. El Ejecutivo, por su parte, no ha querido entrar en debates en un día en el que se celebra el homenaje a las víctimas del coronavirus.

A la salida del Palacio Real, donde Felipe VI ha entregado la gran cruz del mérito civil a las familias de más de un centenar de sanitarios fallecidos por la Covid-19, Casado ha hecho un llamamiento al Gobierno de coalición porque "España necesita un marco legal" que permita imponer restricciones y ha recordado que llevan "un año" pidiendo la reforma de la ley para no tener que hacer uso del estado de alarma. Así, le ha solicitado sentarse "mañana mismo" a adecuar nuestra legislación "a una pandemia que sigue haciendo estragos.

Aun así, Casado ha admitido que "no se pone en duda" la decisión del Gobierno de confinar a los ciudadanos en los meses iniciales de la pandemia, sino "el marco legal que se utilizó no fue el adecuado". A este respecto, ha defendido que en el debate de la primera prórroga del estado de alarma ya criticó que "el gobierno uso la pandemia para ampliar su poder". Además, ha reprochado que el Ejecutivo de Sánchez ponga en duda la sentencia del Constitucional: "Esto no se había visto nunca".

Varios presidentes autonómicos populares que han asistido al acto también han solicitado al Gobierno una norma que les permita imponer restricciones sin depender de las decisiones judiciales. Juanma Moreno, presidente de Andalucía, ha mostrado su "inquietud" ante la "falta de instrumentos normativos para luchar contra esta pandemia" y su homólogo en Murcia, Fernando López Miras, ha pedido del Ejecutivo "una mínima colaboración" para aprobar "una norma que ampare las decisiones" de las comunidades.

Ante las críticas del PP, la ministra portavoz, Isabel Rodríguez, ha evitado entrar en la discusión. "Creo que ningún debate jurídico, por importante que sea, debe emborronar un acto muy emotivo", ha sentenciado, en referencia al homenaje a las víctimas del coronavirus.