El diputado del PP Alberto Casero, que posibilitó con su voto a favor la convalidación de la reforma laboral, ha remitido un escrito al Congreso de los Diputados en el que insiste en que votó "no" y que "el certificado emitido por la Cámara no se correspondía con el sentido del voto que manifestaba", en lo que "parecía un fallo del sistema".

En el escrito que Casero ha enviado a la Cámara Baja el diputado denuncia el "quebranto" al ejercicio de su derecho al voto por parte de la Presidencia del Congreso, es decir, de Meritxell Batet.

"Al efectuar la votación telemática, que era NO, advertí que el certificado emitido por la Cámara no se correspondía con el sentido del voto que manifestaba, es decir, que aparecía como que mi voto había sido SÍ", relata Casero en este escrito.

Y explica, que a continuación, y "consecuencia de lo que parecía un fallo del sistema" intentó ponerse en contacto con la Cámara "antes de que se anunciara el inicio de la votación" para advertir a la Presidencia "el error manifiesto" y que el sentido de su voto recogido por el sistema no expresaba su voluntad.

"Al no recibir respuesta de la Mesa y ante la imposibilidad manifiesta de hacerlo por escrito dada la premura, pero siempre antes de que se anunciara el inicio de la votación", Casero se dirige a su grupo, que lo puso en conocimiento de la vicepresidenta segunda de la Cámara, la popular Ana Pastor, quien se lo comunicó a Batet, que decidió no convocar a la Mesa pese a la petición del PP.

Según Casero, Batet "se negó y decidió unilateralmente y de forma arbitraria arrogarse la voluntad de la Mesa en su conjunto dando inicio a la votación". Ante esa situación el diputado del PP relata que se dirigió personalmente al Congreso con la intención de votar presencialmente lo cual le fue "impedido".

El diputado del PP finaliza su escrito asegurando que su derecho al voto se ha visto vulnerado y que el resultado de la votación de la reforma laboral "no expresa la voluntad popular" puesto que uno de los votos emitidos es contrario al sentido expresado por Casero mediante el sistema telemático.

Además de este escrito, el PP ha presentado otros dos, pidiendo la convocatoria de una Mesa urgente y que no se publique el resultado de la votación, y ha anunciado que está dispuesto a llegar hasta el Tribunal Constitucional.

En el escrito en el que pide que no se publique el resultado de la votación y que por tanto la convalidación de la reforma laboral no figure en el Boletín Oficial del Estado, el PP sostiene que no se respetó ni el Reglamento del Congreso, que señala que el voto emitido deberá ser comprobado personalmente por el sistema que fija la Mesa, ni el acuerdo de 2012 sobre voto telemático.

En concreto, ese acuerdo recoge en su punto cuarto que la Presidencia comprobará telefónicamente "la emisión efectiva del voto" telemático y "el sentido de este", y en el sexto apartado que el diputado que vote telemático "no podrá emitir su voto presencial sin autorización expresa de la Mesa" que en el supuesto de autorizarlo declara el voto telemático nulo y no emitido.