El Gobierno se ha comprometido este miércoles a "bajar la gasolina, la luz y el gas" el próximo 29 de marzo y a hacerlo "de la mano de los socios europeos" y también, espera, de los grupos parlamentarios. Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, ha insistido en esa voluntad aunque públicamente no ha dado ninguna pista de qué fórmula utilizarán. Según él, en estos momentos se están analizando "distintas alternativas" ("ayudas fiscales, ayudas del Estado o poner tope a los precios de la energía para que pueda bajar") y hay que esperar a ver qué decisiones se toman en el seno de la Unión Europea, en la cumbre de los días 24 y 25 de este mes, para acabar de diseñar el plan nacional para conseguir que esa bajada sea "inmediata".
"Somos plenamente conscientes de las dificultades de nuestro país. De cuánto cuesta llenar el depósito de gasolina y tener la casa caliente", ha comentado tras reunirse con representantes del PP en el Congreso. A la cita han ido, por parte del Gobierno, Bolaños y las tres vicepresidentas, Nadia Calviño, Yolanda Díaz y Teresa Ribera; y, por parte del PP, la portavoz, Cuca Gamarra, y los diputados Guillermo Mariscal, Isabel Borrego, Elvira Rodríguez y Mario Garcés. Los conservadores llevan días exigiendo una bajada de los impuestos de manera urgente, por lo que han salido de la cita con un sabor amargo. "No se han cubierto las expectativas y así se lo hemos trasladado. Queremos inmediatez y concreción", ha denunciado Gamarra.
Vox se autoexcluye
El Gobierno seguirá la ronda de reuniones hoy mismo con Ciudadanos, PNV y ERC. Vox ha declinado participar en los contactos con el Ejecutivo. Según fuentes del partido de ultraderecha, no quieren romper el "veto" que consideran que les tiene impuesto el Ejecutivo solo para hacerse una "foto" y formar parte de negociaciones "en despacho" y "a puerta cerrada".
