El primer ministro de Australia, Anthony Albanese, y su homólogo japonés, Fumio Kishida, firmaron este sábado una nueva declaración conjunta sobre seguridad, con la mirada puesta en fortalecer la cooperación en la defensa de un Indopacífico "libre y abierto" frente al auge de China.

"Juntos, estamos acelerando los esfuerzos mutuos para conseguir un Indopacífico estable, libre y próspero", subrayó Albanese durante la ceremonia en Perth (Australia) en la que ambos dirigentes firmaron el pacto.

El acuerdo viene a reemplazar el texto vigente desde hace 15 años, y reconoce "el contexto de seguridad contemporáneo" para "expandir y fortalecer la cooperación en defensa, inteligencia, transición energética y cambio climático", entre otras áreas, según un comunicado de la oficina del primer ministro australiano.

También menciona el refuerzo de la cooperación en la asistencia humanitaria, la respuesta a desastres, y la seguridad marítima y económica.

"(El acuerdo) refleja el profundo y compartido compromiso de lograr un Indopacífico libre y abierto, que sea inclusivo y resistente. Ambas partes se comprometen a comunicarse sobre las contingencias que pongan en riesgo nuestra soberanía e intereses regionales, y a considerar medidas en respuesta", añade el comunicado.

Albanese afirmó que la firma de la declaración "sirve como brújula de nuestra cooperación en seguridad en la próxima década".

El primer ministro nipón había asegurado antes de despegar rumbo a Perth que dos de los puntos clave en la agenda serían "defensa y seguridad" y "conseguir un Indopacífico libre y abierto".

La defensa de un "Indopacífico libre y abierto" es la estrategia promovida por Tokio y Washington para contener el poderío militar chino creciente en la región, y es también uno de los pilares de la alianza Quad, grupo de países que, además de Australia y Japón, integra a Estados Unidos e India.

Se trata del tercer encuentro en persona entre ambos líderes desde que Albanese asumió el cargo en mayo, en un momento en el que sendos países buscan reforzar alianzas de seguridad para afrontar los desafíos crecientes.

Entre ellos se encuentran las disputas territoriales de Japón con China o el deterioro de las relaciones de ambos países con Rusia a raíz de la guerra de Ucrania.

El acuerdo, subraya el comunicado de la oficina de Albanese, "se construye sobre la profunda afinidad entre nuestros pueblos y los valores compartidos de democracia, derechos humanos, libre comercio y un orden internacional basado en las normas".