Para muchos, el de Extremadura es el mejor restaurante de las Comunidades Autónomas. Vinos de Denominación de Origen de la Ribera del Guadiana sirven para acompañar el jamón, que se corta en el acto por campeones de España de la disciplina. Los restaurantes invitados (varios de ellos con estrella Michelín) a la elaboración de los menús, que rotan semanalmente, alternan cocina tradicional con vanguardia. Entre los grandes éxitos de la carta, encontramos el gazpacho extremeño, las migas con torrezno, ajo y uvas o los preñaditos, es decir, pan caliente abierto con prueba de cerdo ibérico. Entre los postres, destaca el típico Repápalo, el helado de aceite de oliva y la muy famosa fruta de hueso de la huerta extremeña.

La relación calidad con precio y la estupenda presentación de los platos son las grandes ventajas. Y se regala un recetario a cada cliente.

Son 23 restaurantes los que rotarán sus diferentes menús. Si gusta algo, es posible que la semana siguiente ya no esté en la carta.

Con 50 euros, una pareja puede comer en Extremadura. Y no se quedan con hambre.