Casetas vivió una mañana animada de vaquillas en lo que se puede considerar el destierro zaragozano ya que la prohibición de acoger festejos populares en la Misericordia es la que ha provocado que sea la plaza de Casetas la que se haya lanzado este año a programar vaquillas con un acuerdo con Interpeñas.
Si bien, no son unas vaquillas al uso ya que el acceso al albero está muy restringido y se trata más de un juego de habilidad que otra cosa, el público respondió ayer y casi llenó el coso taurino. En la arena se vieron algunos buenos movimientos y, sobre todo, ganas de agradar a unos espectadores que tampoco tuvieron que madrugar ya que las vaquillas fueron a las 11 de la mañana.
Los festejos populares por estos Pilares en Casetas concluirán el día 11 con un concurso de recortadores goyescos con toros y novillos a la espera de que acaben las restricciones para futuras ocasiones.
