La Ofrenda de Frutos más multitudinaria de la historia llena de color y solidaridad el centro de Zaragoza

Unas Fiestas del Pilar sin récord de participación en alguno de los actos programados no serían lo mismo, así que este año ha llegado bien ufana la Ofrenda de Frutos para evitar la decepción. Su 'hermana mayor' no consiguió este domingo batir su marca de oferentes (sí lo hizo en duración, menos mal), pero este lunes ha llegado muy orgullosa su 'hermana pequeña' para ponerle remedio. La Ofrenda de Frutos ha superado todos sus registros con unos 3.500 participantes (mil más que el año pasado), aunque esto (quizá tenga menos mérito) ya se sabía de antemano.

La Ofrenda de Frutos está organizada por la Federación de Casas Regionales en Aragón y hasta el año pasado solo podían participar los miembros de estas agrupaciones. En 2024 se decidió abrirla a la ciudadanía con el objetivo de que, además de las comunidades autónomas, también estuvieran representados los 15 distritos de Zaragoza y los 14 barrios rurales. El año pasado participaron 240 personas en representación de la ciudad, mientras que este han sido 724 los que se han inscrito. Todo ello y el aumento de los oferentes vinculados a las Casas Regionales explican el nuevo récord de participación.

"Queremos que la Ofrenda de Frutos sea universal", subrayó hace unos días el consejero de Participación Ciudadana, Alfonso Mendoza, convencido de que la cita "todavía puede crecer sin que sea desmesurado". Y en este mismo sentido se ha manifestado este lunes la alcaldesa Natalia Chueca, que ha asegurado que cree que la Ofrenda de Frutos "va a seguir creciendo en los próximos años".

Cifras al margen, lo importante es que la Ofrenda de Frutos se ha vuelto a celebrar este año en Zaragoza cumpliendo así una tradición y devoción de más de 75 años. De hecho, es más antigua que su 'hermana mayor' al datar del año 1949.

Bajo un cielo plomizo pero sin lluvia, los primeros oferentes han partido de la plaza de Santa Engracia a las diez y media de la mañana, apenas once horas después de que el último ramo de flores se colocara en la estructura de la Virgen del Pilar. El entorno de la plaza se ha convertido en un crisol de culturas con grupos de todas las comunidades autónomas mostrando su música, baile y tradiciones. Muñeiras de Galicia, jotas castellanas o danzas tradicionales valencianas se han bailado y escuchado junto a la iglesia de Santa Engracia.

La alcaldesa ha sido la encargada de abrir la ofrenda, que como siempre ha recorrido el paseo de la Independencia, el Coso y la calle Alfonso hasta llegar a la plaza del Pilar. Seguidamente, las casas regionales de casi todas las comunidades autónomas residentes en Zaragoza han empezado a darle color y sonido al desfile, evidenciando la multiculturalidad del país. Cada uno de los oferentes ha portado la indumentaria típica de su tierra y algunos han desfilado al ritmo de su música tradicional mientras cientos de zaragozanos se agolpaban detrás de las vallas para disfrutar del desfile.

"Llevamos casi 20 años viniendo desde Madrid para participar en la Ofrenda de Frutos. Nos invita la Casa de la Comunidad de Madrid en Zaragoza y la verdad que es una maravilla porque en un rato puedes ver el folclore de todo el país. Nosotros ayer bailamos chotis en el escenario de la plaza del Pilar", ha indicado Manuel, que junto a Mari Carmen y Pilar esperaban en un banco a que les llegara el turno de salir en la ofrenda.

Cerca de ellos, Enrique y su esposa Teresa acababan de colocarse los últimos detalles de su traje tradicional. "Pertenecemos a la Casa de Melilla en Zaragoza. Nací allí pero llevo 55 años viviendo aquí y nos gusta participar porque de alguna forma te hace sentir más cerca de tus orígenes", ha comentado Enrique. "Participamos también en la de flores, pero la de frutos me gusta mucho porque también sirve para ayudar", ha apuntado Teresa.

Como siempre, los oferentes han portado todo tipo de alimentos procedentes de diferentes rincones de España que posteriormente se donan a la caridad. En este sentido, el récord de este año también supondrá una gran noticia solidaria porque el Banco de Alimentos y la Hermandad del Refugio podrán aumentar sus reservas.

"Este año esperamos batir todos los registros y pasar de los 10.000 kilos de alimentos", ha indicado la presidenta de la Federación de las Casas Regionales de Aragón, Lola Sebastián. Muchos de esos productos procedían del entorno de Zaragoza y más desde que en 2024 empezaran a estar representados los barrios rurales. "El año pasado ya participamos y la experiencia fue tan buena que hemos repetido. Es un acto muy arraigado en las fiestas y nos parece genial que lo hayan abierto a la ciudadanía. Además, así podemos representar con nuestros alimentos a la huerta zaragozana", ha subrayado Esperanza, que participaba con el grupo de Movera.

Después de tres horas y media de ofrenda, el último grupo entraba en la basílica del Pilar para depositar sus alimentos, un hecho diferencial respecto a la de flores que también atrae a muchos de los oferentes. "A mí, cuando entro y me pongo delante de la Virgen, siempre se me caen las lágrimas de la emoción", ha concluido la madrileña Pilar, que lleva 18 años viniendo ex profeso desde la capital para participar en la Ofrenda de Frutos.