La construcción se encamina hacia la eficiencia energética

Los retos, carencias y oportunidades del sector de la edificación fueron algunos de los aspectos tratados en un foro organizado por EL PERIÓDICO DE ARAGÓN

Cristina Cabello, Rafael Gracia Aldaz, Francisco José Díaz y Jordi Martínez Arribas protagonizaron la mesa redonda

Cristina Cabello, Rafael Gracia Aldaz, Francisco José Díaz y Jordi Martínez Arribas protagonizaron la mesa redonda / ANGEL DE CASTRO

Rebeca Magallón

Dos tercios de las viviendas en Aragón fueron construidas antes de 1981, año en el que se promulgó la primera ley Española en la que se fijaban unos mínimos de aislamiento térmico. Este hecho marca la necesidad de una rehabilitación del parque inmobiliario de la comunidad autónoma que impulse la eficiencia energética en los hogares. Este y muchos otros aspectos, como los retos del sector de la construcción, fueron tratados en el primer Foro Zaragoza 2030 para una ciudad climáticamente neutra.

En la mesa redonda de este foro participaron Rafael Gracia Aldaz, presidente Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Zaragoza; Jordi Martínez Arribas, gerente de Ensaco; Francisco José Díaz, responsable del Área Inmobiliaria de Coanfi; y Cristina Cabello, arquitecta y coordinadora de las Oficinas de Apoyo a la Rehabilitación del Colegio Oficial de Arquitectos Aragón. El coloquio estuvo moderado por el subdirector de este diario, Ricardo Barceló.

El debate dio comienzo analizando los retos a los que se enfrenta el sector de la construcción en el proceso de transformación energética. Este sector supone entre un 5 y 6% del PIB en España y genera hasta el 20% de los residuos de la Unión Europea. Rafael Gracia fue el primero en tomar la palabra comentando que «el principal inconveniente es el gran número de viviendas que necesitan una rehabilitación para poder implantar sistemas que aseguren la eficiencia energética», y es necesario «atacar ese parque inmobiliario antes de construir más». Francisco José Díaz, de Coanfi, coincidió con Gracia y aseguró que es «fundamental apostar por la rehabilitación», pero, en cuanto a la construcción de nuevas viviendas, «es imprescindible pensar en la eficiencia de los recursos y de los propios edificios».

Jordi Martínez, de Ensaco, añadió que además hay que dar «un paso más y dotar a esos edificios de inteligencia, apostar por sistemas como la domótica o la aerotermia que hagan del hogar un espacio eficiente por sí solo». Esta, aclaró, «es una medida inmediata de ahorro de energía».

Por último, Cristina Cabello puntualizó que «hay que construir menos y mejor y apostar por la rehabilitación». La clave, amplió, reside en la búsqueda de materiales «que dejen menor huella y se comience con la transformación energética desde el primer momento».

Los técnicos

Carencias

El segundo aspecto que se abordó fue referente a las demandas que tiene el sector. Cristina Cabello destacó «la necesidad de una especialización en la rehabilitación de las viviendas, lo que requiere una mano de obra altamente cualificada», además de la «inexistencia de sistemas eficientes con los que dar salida a los residuos producidos en las obras». Rafael Gracia estuvo de acuerdo: «En el sector de la construcción se necesita mano de obra», algo que, apostilló, «se podría solucionar con la creación de campañas que muestren las oportunidades y ventajas que este ofrece». La construcción, destacó, «es el tercer sector con más salidas laborales», por lo que es «muy necesario crear un mapa de trabajo al que tenga acceso la población joven para poder favorecer un relevo generacional». Por su parte, Franscisco Díaz resumió que «cuesta mucho atraer y retener el talento» y Jordi Martínez reiteró la idea de «promocionar el empleo vinculado a la edificación de la vivienda» ya que «los proyectos de rehabilitación generan una gran cantidad puestos e trabajo».

Impulso tecnológico

Con el gran avance tecnológico y la innovación, muchos son los procesos que se han ido industrializando y los participantes en el foro estuvieron de acuerdo en que el sector de la vivienda debe ser uno de ellos.

Francisco José Díaz desarrolló la idea del «cambio de mentalidad en cuanto a la construcción. Las obras ya no son tanto ladrillo y hormigón, sino que se apuestan por otros materiales más eficientes y que se puedan reutilizar». Actualmente la urbanización se basa en «identificar los edificios como productos que no dejen huella, que se puedan desensamblar y no dejen rastro». Jordi Martínez, por su lado, añadió la importancia de los sistemas de eficiencia «dentro del propio hogar», buscar el ahorro energético en «el día a día» con, por ejemplo, el empleo de bombas de calor eléctricas como alternativa a los combustibles fósiles tradicionales.

Francisco José Díaz quiso dar un paso más y aprovechar el impulso de las nuevas tecnologías para «perder un poco la burocracia». Reivindicó que «la relación con la Administración por parte de las empresas debería ser ya electrónica y no tanto en papel», que resulta «ineficiente».

Más de 40 personas siguieron la jornada en directo

Más de 40 personas siguieron la jornada en directo / ANGEL DE CASTRO

Fondos europeos

A la hora de desarrollar proyectos de eficiencia energética, todos los ponentes estuvieron de acuerdo en la necesidad de obtener financiación, como los Fondos Europeos Next Generation. Blanca Soláns, directora general de Fondos Europeos del Ayuntamiento de Zaragoza comentó que desde el gobierno local «hay proyectos ya lanzados por valor de 144 millones de euros de los cuales se han reconocido en 77 millones, teniendo en cartera unos 80 millones de euros más en otros proyectos». Soláns especificó que, de los ya reconocidos, el sector de urbanismo y rehabilitación supone el 35% y aseguró que estas ayudas «suponen un impacto importante en el sector porque pueden favorecer la generación de oportunidades y de trabajo de calidad».

Cristina Cabello aseguro que «en materia de rehabilitación energética la colaboración público-privada es inevitable, sobre todo en cuanto a la rehabilitación de las residencias privadas». Explicó que «hasta no hace mucho el ciudadano no era consciente de la necesidad de rehabilitar su vivienda en orden de conseguir un ahorro energético» pero, gracias a estas ayudas se está dando un impulso para que las actuaciones se lleven a cabo. En cuestión de cifras, desarrolló que los usuarios pueden recibir hasta «18.800 euros por vivienda si se realiza una rehabilitación energética que consiga una reducción de más de 60% del consumo en los edificios, financiando así el 80% del proyecto y quedando el 20% a cargo del ciudadano». 

En esta línea, Francisco José Díaz también añadió la dificultad del acceso a una primera vivienda por parte de la población joven, aseguró que «actualmente los ciudadanos no tienen la capacidad de ahorro para poder hacerlo, por ello las ayudas al alquiler tienen que estar también sobre la mesa».

Al finalizar la mesa se desarrolló un coloquio entre los representantes y parte de los asistentes en el que se trataron varios asuntos de diversa índole.

Ricardó Barceló con responsables de Idom e Ingennus

Ricardó Barceló con responsables de Idom e Ingennus / ANGEL DE CASTRO

Área de reflexión

Tras la mesa redonda, los participantes y representantes del Ayuntamiento de Zaragoza se unieron a los asistentes en un coloquio sobre el sector de la construcción y sus retos y oportunidades.

Entró en este debate un aspecto todavía no comentado, el papel de las entidades financieras a la hora de desarrollar proyectos de eficiencia energética. Los participantes desarrollaron que «sería una muy buena idea que las instituciones bancarias facilitaran la financiación que queda a cargo de los ciudadanos».

Por otro lado, se puso sobre la mesa la intensa burocracia por la que los usuarios deben pasar a la hora de iniciar los trámites. Es por ello que destacaron el papel de las oficinas técnicas, tanto a nivel local como autonómico, para «ayudar en la tramitación y que sean más los ciudadanos los que lleven a cabo una rehabilitación para la eficiencia energética». Cristina Cabello puntualizó que a la Oficina Técnica de Rehabilitación del Colegio Oficial de Arquitectos Aragón ya han llegado «hasta 3.000 consultas».

Los proyectos de rehabilitación aportan muchas ventajas, no solo el mayor confort en el hogar o la revalorización de los inmuebles, como subrayaron los técnicos, hay gran variedad de incentivos. Un ejemplo serían las deducciones en el IRPF para los particulares que acometan obras de eficiencia energética. Además, se resaltó también, la modificación en 2020 por parte del Ayuntamiento de Zaragoza, para eliminar el requisito de superficie mínima para la instalación de placas solares para solicitar la bonificación del IBI, lo que supone todo un aliciente para los ciudadanos.

Para finalizar, los técnicos confirmaron la falta de concienciación en la población, aseguraron que la construcción sigue los pasos del sector del automóvil, «pero aún queda mucho por hacer. Actualmente la ciudadanía es consciente de las ventajas de un coche eléctrico, pero sin embargo no busca la eficiencia energética en su hogar». Por ello, animan a las personas a reflexionar sobre ello y «dar el paso en el camino hacia las renovables».