Se planta el Real Zaragoza en la semana del inicio de la Liga con muchas más incógnitas que certezas, lo cual genera una incertidumbre para nada positiva. La venta del club y su inexplicable retraso, la lenta planificación deportiva y la campaña de abonados son los ejes de la opinión de un zaragocismo que vive con cierto desdén toda esta situación, pero a la vez con el optimismo propio de aquel que no puede evitar sentir a su Real Zaragoza. Aunque todo vaya mal o sea muy mejorable, hay cierta ilusión. Con pies de plomo, eso sí.

Sobre la venta, las sensaciones entre los zaragocistas fluctúan entre la expectación, el cuidado y el enfado por la falta de transparencia en el proceso. «Creo que es necesaria. La directiva entró en un momento crítico para salvar al club, tuvo mala suerte un par de años y gracias por todo, pero falta visión de futuro y sus proyectos no son para subir. La necesitamos, pero me da un poco de mala espina porque estaba fraguada desde la salvación y estamos en agosto», explica Adrián Albericio. Además, el turiasonense resalta que «se necesita a alguien con poso y hay que ser muy cuidadoso, porque hay que hacer las cosas bien».

Parecido piensa Sergio Ríos, que cree que «es necesaria porque hace falta una inyección económica y con los actuales propietarios no va a venir, pero me cuesta fiarme de los teóricos nuevos propietarios por todo el tiempo que se lleva dilatando la venta, la falta de los fondos y que todavía no han dado la cara ante la afición ni ante los medios».

Por su parte, José Manuel Gómez considera que «puede ser positiva porque además no podemos estar cada año vendiendo a nuestros mejores jugadores para subsistir», pero afirma que «no se puede demorar mucho más» y que «todo se debe hacer de una manera correcta».

Para Rosa Lázaro, una fija en el Gol Norte de La Romareda, «es una incertidumbre demasiado alta para esta afición», y no se termina de fiar de la nueva propiedad: «La Fundación nos volvió a ilusionar, pero han pasado los años y ha sido una nueva decepción. Los nuevos dueños e inversores no parece que traigan un cambio enorme, sino más de lo mismo», dice.

«Entiendo que haya que llevar la venta en secreto, pero se echa de menos que alguien dé la cara»

Ricardo Blancas - Presidente de la Peña Zaragocista Bal de Tena

Entre las peñas, sin embargo, ponen más el foco en la falta de explicaciones y el oscurantismo: «Entiendo que haya que llevarlo en secreto, pero se echa de menos que se dé la cara y se explique el rumbo de las negociaciones. Estás aquí que no sabes a qué acogerte», incide Ricardo Blancas, presidente de la Peña Zaragocista Bal de Tena. «Se está haciendo con un secretismo que en fin. Echo de menos que Lapetra, Cuartero o el que sea saliera diciendo que vamos a vender el club, haciendo tramitaciones y que estaremos informando. Un poco de transparencia. Es su dinero obviamente, pero el club es de todos», asegura Arturo Mora, presidente de la Peña Zaragocista de La Almozara.

Dos delanteros, clave

En cuanto a la planificación deportiva sí que hay consenso y uniformidad de opiniones. Hay una buena base y confianza en JIM tras lo demostrado el pasado curso, pero todos coinciden en que se necesitan todavía varios fichajes y, sobre todo, poner el foco en la punta del ataque. Hay que firmar goles sí o sí.

«El equipo necesita fichajes, cinco o seis. Hay que traer calidad y sobre todo delanteros que metan goles. Uno que anote 20 para empezar. Con JIM vamos a jugar al 1-0 y la que tengamos necesitaremos enchufarla porque en defensa sí que estamos bien equipados», reconoce Arturo Mora.

Rosa Lázaro se muestra más tranquila por las palabras de JIM y Torrecilla durante los últimos días, pero sí que lamenta que «la situación está estancada y los jugadores se presentan a cuentagotas». Sergio Ríos cree, sobre todo, «que falta dinamita arriba». «La plantilla es, sobre todo de medio campo hacia arriba, pobre. Falta gol, mínimo dos delanteros, y un extremo o mediapunta, un pivote que complemente o dé algo diferente a Eguaras y un central para apuntalar la defensa», explica antes de afirmar que «es muy frustrante ver cómo jugadores que podrían venir y ser válidos no lo hacen». «Veremos quién viene finalmente, pero vamos a empezar la temporada con una plantilla incompleta y nos pueden costar puntos igual de importantes que los del final de temporada», apuntala Ríos.

«Con un par de buenos delanteros y mordiente puedes marcarte un Cádiz y subir a Primera, porque con JIM sabemos defender»

Adrián Albericio - Socio del Real Zaragoza

Ricardo Blancas explica que «esto es un dominó y en el momento en el que no se termina de cerrar la venta todo se ve afectado». En suma, «no se sabe el presupuesto con el que se cuenta y los buenos jugadores cuestan dinero», apunta. Y José Manuel Gómez es muy claro en su valoración: «Sin fichajes no da para subir y creo que lo que más necesita es gol, dos delanteros», comenta. Ahora bien, la demora en la planificación deportiva «no me preocupa demasiado porque por la pandemia los equipos no disponen de una gran capacidad económica y está siendo un mercado lento, afortunadamente para nuestros intereses».

Por último, Adrián Albericio es el que va más lejos y piensa que, por el estilo de juego de JIM, si se acierta con los fichajes se puede subir a Primera: «El año pasado no teníamos un equipo tan esperpéntico, lo que no había era gol. El mejor delantero era un chavalín, Azón. Este equipo con un par de buenos delanteros puede hacer algo interesante y más cuando se dé salida a gente que cobra tanto como Larra o Vuckic. El problema es que no sabemos con qué límite salarial se va a poder contar. Sobre todo necesitamos delanteros, porque sabemos defender gracias a JIM, con quien nos tocó la lotería, y traer a algún medio. Si a este equipo le pones mordiente puedes marcarte un Cádiz y subir», explica Albericio.

La campaña de socios

En cuanto a la campaña de abonados sí que hay más disparidad de opiniones. Los más críticos, como Blancas, lamentan que «no han tenido un detalle con los abonados». «Llevo 18 años de socio y no se ve nada, además cuando con muy poco nos conformamos», resalta. En definitiva, con lo que está sucediendo, «es muy difícil ser zaragocista».

Ríos considera que es «lamentable por la forma de presentarla, por la falta de explicaciones y porque no ha habido ningún detalle de cara al aficionado después de tanto tiempo sin ir a La Romareda y de sufrir tanto la temporada pasada. «Parece que solo puede pagar y callar», manifiesta. «No han tenido consideración alguna con los que pagamos el año pasado a fondo perdido sin poder ir, nos deben todavía dinero de la primera etapa de la pandemia que se iban a devolver y nada. Ni un solo detalle, es una vergüenza», recalca Arturo Mora.

«No han tenido consideración con los que pagamos el año pasado a fondo perdido. Es una vergüenza»

Arturo Mora - Presidente de la Peña Zaragocista de La Almozara

Más transigente es Lázaro, que se sitúa en un punto medio. Reconoce que había que sacarla ya «por la cercanía de la Liga», pero también asegura que «los abonados esperábamos algún tipo de compensación por el año perdido por el covid». «Seguimos siendo los eternos olvidados», agrega.

En el otro lado de la balanza se encuentran Albericio y Gómez. El primero entiende la dificultad de la campaña de abonados porque «el club tampoco sabía qué podía sacar y cómo porque no puede exigir todo el abono si no se puede entrar a La Romareda o poner los precios bajos del año pasado si al final sí que se puede entrar». Y por último, Gómez es contundente con su opinión positiva: «Ha sido correcta. Con el covid y el cambio de propiedad era de esperar que aguardasen y los precios estaban acordados. El club tiene una situación económica complicada y no puede ir regalando el abono como hacen otros equipos», concluye.