Las autoridades iraquís harán hoy entrega a los inspectores de la ONU de la declaración sobre sus arsenales: serán un total de 24.000 páginas, de las cuales 10.000 constituyen la "declaración principal" y 14.000, los anexos. Por razones obvias, el Consejo de Seguridad no hará pública la declaración el domingo, ya que ha pedido a los inspectores de desarme que hagan ellos una primera evaluación del documento.

Citando "fuentes iraquís bien informadas", la cadena de televisión Al Jazira informó de que el inventario de armas incluirá dos periodos: desde los años 70 a 1990 y desde 1990 hasta hoy. El informe incluirá "todos los detalles sobre el programa armamentístico iraquí, incluso indicaciones sobre las técnicas de fabricación de armas de destrucción masiva", según Al Jazira.

El Consejo de Seguridad pidió a la Comisión de Control, Verificación e Inspección de la ONU (Unmovic) que sea "depositaria" del documento y que lo estudie antes de distribuirlo a los miembros del Consejo. La Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) deberá asegurarse de que el informe no contiene ningún elemento que entre en contradicción con los tratados internacionales sobre desarme.

En concreto, la labor de la Unmovic y de la AIEA será cribar la declaración iraquí para que la copia que se entregue al Consejo de Seguridad no contenga información confidencial, por ejemplo sobre cómo se fabrica un arma nuclear, química o biológica. La entrega de una copia a todos los miembros del Consejo en la que venga explicada esa fabricación daría acceso a ese conocimiento a países que no lo tienen.

LA TRADUCCION "Ningún miembro del Consejo tendrá el documento el lunes", dijo el jefe de los inspectores, Hans Blix. Sobre cuándo podrá ser divulgado, el presidente del Consejo, Alfonso Valdivieso, fue explícito: "Dependerá de la logística de la traducción". La intención es que el Consejo pueda reunirse la semana próxima "para decidir la forma en que tratar esta declaración", añadió.