El ¡cocorico! (tradicional grito de orgullo y satisfacción en Francia) de la mayoría de los editorialistas franceses ante la firmeza del "no a la guerra" del presidente, Jacques Chirac, contrasta con la virulenta campaña de prensa desatada en Estados Unidos y Gran Bretaña contra ese "pigmeo travestido en Juana de Arco", como definía el lunes The Wall Street Journal al jefe de Estado de Francia.

Convencidos de que la "deuda de sangre" contraída por los franceses en 1944 es eterna, los editorialistas norteamericanos no comprenden la "ingratitud" de Francia y denuncian su "cobardía" ante el mundo. Y en esta línea, The New York Post se pregunta: "En un momento en que los soldados americanos están dispuestos a combatir para salvar al mundo de un tirano tan vil como Hitler, ¿dónde están los franceses?". Y a continuación, contesta: "Se esconden, cagados de miedo".

LEXICO DE FRANCOFOBIA La violencia y la frecuencia de los ataques antifranceses ha obligado a The New York Times a proponer a sus lectores un "léxico de francofobia". El autor de esta iniciativa, Geoggrey Nunberg, comienza con los calificativos de "pérfido" e "indigno de confianza" utilizados por un comentarista de la televisión. Desde estas mismas páginas, incluso se ha llegado a sugerir que se suprima a Francia del Consejo de Seguridad de la ONU para que ocupe su puesto la India que "es un país mucho más serio".

Por su parte, los medios de comunicación británicos se han sumado también a esta campaña. The Sun publicó ayer un fotomontaje de Sadam Husein posando ante la torre Eiffel como Hitler en 1940. "Mirad lo que ocurre cuando Francia cede ante los tiranos", dice el diario que presenta, además, un total de 10 chistes antifranceses de gusto exquisito.