La cumbre del Movimiento de los No Alineados (NOAL) concluyó ayer en La Habana con una declaración de apoyo al programa nuclear de Irán y con la exigencia de los 116 países miembros a Israel para que se adhiera "sin demora" al Tratado de No Proliferación Nuclear y someta todas sus instalaciones nucleares a las inspecciones del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). En la resolución final, los No Alineados defendieron el derecho de todas las naciones al desarrollo de la energía nuclear con fines pacíficos. No obstante, exhortaron a Irán a mantener la cooperación con el OIEA para impulsar una solución dialogada al conflicto nuclear.

La cumbre propició numerosos contactos bilaterales. El más relevante fue el reencuentro entre los mandatarios de India y Pakistán. El presidente paquistaní, el general Pervez Musharraf, y el primer ministro de India, Manmohan Singh, acordaron reanudar las negociaciones de paz.

Los representantes de los 116 países en desarrollo mostraron su preocupación por la definición de terrorismo y la cuestión palestina. Al mismo tiempo, condenaron "el unilateralismo, el ataque preventivo, las acciones militares y el uso de la fuerza", así como la "calificación de países buenos y malos".

VOZ DÉBIL Mientras Raúl Castro presidía las sesiones generales, la tele cubana mostró imágenes del encuentro del convaleciente Fidel Castro con el secretario general de la ONU, Kofi Annan. "Tiene la mano fuerte y muy buena apariencia", le dijo Annan al líder cubano. Pero el vídeo, muestra a un Fidel desmejorado que, con voz muy débil, saluda al secretario general de la ONU, le asegura que está "muy feliz" y se interesa por su viaje a Oriente Próximo.