Más de 500 personas están desaparecidas después de que un barco indonesio se hundiera en la noche del pasado viernes al ser alcanzado por una fuerte tormenta a 40 kilómetros de la costa, cuando viajaba entre las islas de Borneo y Java. Los equipos de salvamento consiguieron rescatar ayer a 74 supervivientes y dos cadáveres, pero el mal tiempo y el fuerte oleaje están complicando las tareas de búsqueda.

El transbordador, llamado Senopati Nusantara, transportaba oficialmente a 605 personas, incluidos los 63 tripulantes. Sin embargo, es habitual que en Indonesia --un país formado por 17.000 islas, lo que hace del marítimo el principal medio de transporte--, los navíos lleven a más personas de las que aparecen en las listas oficiales. El ferri, de fabricación japonesa, tenía capacidad para 850 pasajeros, por lo que la cifra de desaparecidos podría ser aún mayor.

El ministro de Transportes de Indonesia, Hatta Rajasa, explicó que el barco se incendió antes de partirse en dos y hundirse. El fuerte oleaje comenzó a golpear la embarcación el viernes por la tarde, hasta hacerlo con tal vehemencia que todo el mobiliario que había a bordo del buque se desplazó.

"La tripulación nos pidió calma y nos aseguró que no iba a pasar nada. Pero aproximadamente a las 23.15 horas el barco comenzó a escorarse y después zozobró", narró uno de los supervivientes. Los miembros de la tripulación ordenaron a los pasajeros ponerse los chalecos salvavidas y dieron instrucciones de abandonar el barco antes de que se hundiera.

MOMENTOS DE PÁNICO El testimonio de los supervivientes, rescatados cuando iban a la deriva en botes o aferrados a maderos, está guiando a los equipos de rescate. "Hemos recibido información de que docenas de pasajeros, aparte de los que ya han sido rescatados, usaron botes salvavidas. Estamos tratando de encontrarles", declaró Rajasa.

Los supervivientes del naufragio narraron el pánico que vivieron durante el hundimiento. Uno de ellos dijo que intentó salvar a un niño cuando fue golpeado por una barra metálica: "Estaba atrapado en el barco, pero fui arrastrado por el agua y vi a mucha gente luchando por salvarse", añadió. Desde un hospital de Rembang, tras ser rescatado por un pescador, otro superviviente explicó que su hermana, de 18 años, viajaba con él y se encontraba desaparecida.

"Seguiremos con las tareas de búsqueda durante siete días --explicó el ministro de Transportes--, pero este periodo puede aumentar hasta que estemos seguros de que hemos hecho hasta el último esfuerzo", aseveró. De hecho, sigue en marcha el dispositivo desplegado tras el hundimiento, el pasado martes, de otra embarcación en Sumatra. "De 51 pasajeros, hemos hallado cuatro cadáveres y 28 personas han sido puestas a salvo", informó un portavoz de la policía sumatrina.