VUELCO POLÍTICO EN LA ISLA ITALIANA

La izquierda y los indignados ganan en los comicios de Sicilia

Los conservadores, que iban divididos, pierden el Gobierno

ROSSEND DOMÈNECH

La mitad de los sicilianos no ha votado en las elecciones autonómicas del pasado fin de semana y la otra mitad ha revolucionado el mapa político de la isla, que cuenta con el mayor grado de autonomía de toda Italia, lo que podría constituir un presagio para las elecciones generales previstas para el próximo año, tras la experiencia del Gobierno tecnócrata de Mario Monti y las dudas existenciales de Silvio Berlusconi acerca de retirarse o volver a la política.

El 50% de quienes han votado han apoyado a los progresistas y a las fuerzas que los apoyan; han castigado a los conservadores (26%) y premiado a los seguidores del cómico Beppe Grillo del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), que se presenta sin un programa, pero con una filosofía contra los partidos y la casta política. Los antisistema de Beppe Grillo (M5S) han conseguido por sí solos el 15,3%.

El primer vencedor es el candidato de los progresistas, Rosario Crocetta (31,7%), que podrá gobernar la isla, mientras que el candidato del centro derecha de Silvio Berlusconi, Nello Mussumeci, ha sufrido un revés mayúsculo, situándose en el segundo puesto después de que los sicilianos hubiesen votado en las anteriores elecciones masivamente a los conservadores, que se presentaron divididos en tres grupos.

La principal novedad es el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), liderado por el cómico Beppe Grillo, que con un mensaje populista y contra los partidos tradicionales, se ha adjudicado, partiendo de la nada, el tercer puesto de los votos de la isla.

El candidato izquierdista estaba apoyado por los progresistas del Partido Democrático (PD), los centristas de la Unión Democrática de Centro (UDC), los socialistas (PSI) y los moderados de la Asociación para Italia (API). Antes del cómputo final, su candidato ha obtenido un 31,7% de los votos, pero que, desglosado, representa sólo un 13,5% de los votos claramente progresistas (PD), contra el 17,5% de los seguidores de Grillo.

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