Un grupo de 40 religiosas y huérfanos se encuentran atrapados en un convento en la ciudad siria de Malula, de mayoría cristiana, reveló hoy el patriarcado griego-ortodoxo de Antioquía y Oriente, que lanzó un llamamiento en su ayuda.

"Las organizaciones humanitarias deben enviar convoyes con ayuda humanitaria para el monasterio histórico de Mar Takla (Santa Tecla) y para quienes están refugiados en su interior, entre ellos unas 40 religiosas y huérfanos", afirmó en un comunicado.

La localidad de Malula, una de las pocas en el mundo donde aún se habla el arameo, la lengua en la que se expresaba Jesucristo, se ha transformado desde comienzos de mes en un campo de batalla entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes.

"El monasterio de Mar Takla atraviesa un momento difícil y vive días dolorosos, porque está en medio de una zona de tiroteos, por lo que obtener suministro es difícil y peligroso", se agrega en la nota.

Según esta iglesia de Oriente, el generador eléctrico del convento "no funciona a causa de los combates, por lo que se ha interrumpido el suministro de agua para los que están en su interior y amenaza sus vidas".

El lugar está ubicado en medio de los dos frentes de la guerra, ya que una mitad se encuentra en los cerros bajo el control de los rebeldes y la otra mitad está en el centro de la pequeña localidad, en manos de las fuerzas del régimen.

Desde que se iniciaron los combates en Malula, muchos de sus habitantes han abandonado el pueblo para refugiarse en zonas más seguras, sobre todo después que combatientes yihadistas tomaran su control durante tres días antes de que el Ejército consiguiera recuperarlo.