La segunda caja negra del A320 de la aerolínea alemana Germanwings que se estrelló en los Alpes franceses el pasado día 24 ha sido encontrada este jueves por los investigadores, según han indicado fuentes de la investigación.

El dispositivo, que contiene el registro de los parámetros de vuelo del avión, ha sido hallado por los gendarmes que desde hace 10 días trabajan en el lugar del accidente donde murieron los 150 ocupantes del vuelo que unía Barcelona con Düsseldorf.

La segunda caja negra deberá completar los datos obtenidos de la primera, encontrada el día mismo del siniestro, y que contiene las grabaciones registradas en la cabina del aparato.

De las mismas se desprende, según indicó el fiscal de Marsella, Brice Robin, que el copiloto, Andreas Lubitz, se encerró en la cabina de pilotaje cuando el comandante se ausentó para ir al baño y puso el avión en descenso hasta que se estrelló en el macizo de los Trois Évêches. El fiscal indicó que todo apunta a que Lubitz lo hizo de forma voluntaria.

El estudio de la segunda caja negra, del que se encargarán los expertos de la Oficina de Investigación y Análisis (BEA), permitirá corroborar la versión de los hechos que se desprende de la primera.

PRIORIDAD DE LOS INVESTIGADORES

Desde el día mismo del accidente, la búsqueda de la segunda caja era una de las prioridades de los investigadores, pero la violencia del accidente del avión, que se estrelló contra la roca a 700 kilómetros por hora, la mantuvo muy escondida entre los restos de fuselaje.