Kenia afronta el jueves una segunda jornada electoral después de que el Tribunal Supremo anulara los resultados de los comicios, que tuvieron lugar el pasado 8 de agosto, por irregularidades durante el proceso. El líder del partido opositor, Ralia Odinga, pidió el miércoles a sus votantes que boicotearan las elecciones ya que el Comité Electoral (IEBC, en sus siglas en inglés) no había realizado ninguna mejora para asegurar una jornada electoral con garantías.

La policía y muchos manifestantes a favor de Odinga ya se han enfrentado en algunos bastiones feudo de su partido, la Súper Alianza Nacional (NASA, en sus siglas en inglés). Odinga pidió ayer que sus seguidores se quedaran en casa, sin embargo, en ciudades como Kismu, Siaya o Homa Bay, en oeste del país, o en barrios chabolistas de Nairobi, como Kibera o Mathare, se han organizado barricadas para evitar la llegada del material electoral.

ENFRENTAMIENTOS ENTRE LA POLICÍA Y LOS MANIFESTANTES

Los manifestantes han evitado en muchas zonas del país la apertura de algunos colegios e incluso han impedido que los funcionarios de la Comisión Electoral llegaran a los almacenes designados para recoger el material necesario para la votación.

Las fuerzas de seguridad han respondido a este boicot con gases lacrimógenos, disparos al aire y camiones con agua. En Nairobi, donde sobrevuelan dos helicópteros, la policía ya ha detenido a varios manifestantes. En total el despliegue policial alcanza los 130.000 agentes.

NORMALIDAD EN LA MAYOR PARTE DEL PAÍS

El ministro de Interior en funciones, Fred Matiang’i, ha asegurado que el 90% de los colegios electorales se han abierto sin ningún problema. Sin embargo, aunque en la mayoría de zonas del país la votación está transcurriendo con total normalidad, la participación registrada por el momento es menor que la registrada en las elecciones del pasado 8 de agosto. Unos comicios en los que el presidente del Gobierno y candidato para la coalición Unión Africana de Kenya (KANU, sus siglas en inglés), Uhuru Kenyatta, obtuvo la victoria. Durante esta jornada, Kenyatta ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que acuda a las urnas y permita que el país "siga adelante".

Tras los primeros comicios, en los que Kenyatta obtuvo el 54% de los votos, 24 personas fallecieron en manos de la policía por las protestas que condenaban los resultados electorales. Los equipos observadores de la Unión Africana y de la Unión Europea elogiaron el proceso electoral y afirmaron que no se había producido ningún fraude en el recuento.

Sin embargo, el Tribunal Supremo cedió ante las demandas de Odinga, quien acusaba a la Comisión Electoral de conspirar en el reencuentro de votos, y decidió suspender los resultados obtenidos durante la jornada del 8 de agosto.