En medio de rumores sobre una inmediata convocatoria de nuevas elecciones, al menos tres personas murieron por disparos de bala y alrededor de 30 resultaron heridas durante un enfrentamiento entre manifestantes y la policía este martes en la zona de Senkata, en El Alto, la ciudadela que rodea a La Paz, a 4500 metros de altura sobre el nivel del mar. Los agentes de seguridad intervinieron para levantar el bloqueo que impedía pasar a los camiones encargados de aliviar el desabastecimiento de gas que ha llegado a afectar a la misma sede del Ejecutivo. Se trata de la primera acción represiva desde que el Gobierno de facto de Bolivia emitió el decreto que protege a los uniformados de ser llevados a los tribunales por violaciones a los derechos humanos.

"Nos están matando!", gritó un vecino cerca de la planta de hidrocarburos de Senkata, cuando comenzó el operativo, según el diario paceño 'La Razón'. Los manifestantes exigían la dimisión de la senadora Jeanine Áñez, quien se autoproclamó presidenta boliviana tras la dimisión de Evo Morales. El médico Aiver Huaranca aseguró que fue también blanco de las balas cuando atendía a un herido de gravedad que terminó por perder la vida.

Responsabilidad penal

Las fuerzas de la policía y el Ejército levantaron también el bloqueo de los campesinos en la carretera que conecta a la región de Santa Cruz con Cochabamba. Días atrás, Áñez emitió un decreto que exime a los uniformados de responsabilidad penal en cumplimiento del deber encomendado de normalizar la situación política del país. La orden fue criticada duramente por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).