Crece la tensión en Tierra Santa. La violenta jornada que se inició en Jerusalén este lunes ha aumentado durante la madrugada con bombardeos aéreos sobre la Franja de Gaza. Estos ataques israelís han dejado al menos 26 muertos, nueve de los cuales eran niños, y 122 heridos. A su vez, los cohetes lanzados desde Gaza por Hamás han acabado con la vida de dos mujeres israelíes. La Media Luna Palestina ha confirmado más de 500 heridos por los enfrentamientos en Jerusalén. Los disturbios se han extendido hacia otras ciudades árabes en Israel y un hombre árabe-israelí ha sido asesinado en Lod, en el centro del país. En los cielos, la noche más violenta desde el 2014 se alarga durante el día.  

Mientras los gazatís lloran a sus mártires, los medios israelís ponen el foco en los más de 200 cohetes que ha lanzado Hamás desde la Franja. Unas 20 personas han resultado heridas, una de las cuales está grave. Israel está listo para una escalada "indefinida", según ha afirmado el jefe de Estado Mayor, Aviv Kochavi. El ministro de Defensa, Benny Gantz, ha aprobado la convocatoria de 5.000 soldados reservistas, prueba que reafirma la intención de Israel de usar sus fuerzas terrestres en Gaza. 

"Que sus nombres sean borrados"

En Jerusalén, foco de enfrentamientos en los últimos días, se vive una tensa calma. “Que sus nombres sean borrados”, cantaban miles de judíos ultranacionalistas frente al Muro de las Lamentaciones. Mientras, dentro de la Explanada de las Mezquitas para los musulmanes o el Monte del Templo para los judíos, lugar sagrado para ambas religiones, se provocó un incendio. Esta proclama, normalmente dirigida hacia Hitler o Amalec, enemigo de los israelís, ahora se usaba para referirse a sus vecinos palestinos. 

Desde Gaza, la Yihad Islámica sigue lanzando cohetes hacia territorio israelí, sobre todo a las ciudades fronterizas. Los proyectiles han impactado en algunos hogares israelís mientras la población se mantiene a salvo en refugios. El Ejército israelí ha reconocido haber atacado a 140 objetivos de Hamas en la Franja, entre los cuales incluye lugares de fabricación y almacenamiento de cohetes, campos de entrenamiento, dos túneles subterráneos y la casa de un comandante.

Solidaridad árabe israelí

Los disturbios se han extendido por el territorio de Israel en las principales localidades árabes. Hace años que la población árabe de Israel, los palestinos que en 1948 no fueron expulsados de sus casas, parecía desvinculada de la causa palestina. Pese a su condición de ciudadanía de segunda, la lejanía real con la opresión de los palestinos en las ocupadas Cisjordania o Jerusalén Este, o la Gaza bloqueada les hacía ajenos a la lucha. Pero en las últimas semanas, y sobre todo tras la violenta jornada del lunes en Jerusalén, ciudades como Nazaret o Haifa se han volcado en solidaridad con los palestinos.

Un joven árabe israelí ha sido asesinado a tiros en la ciudad de Lod, en el centro de Israel. Dos judíos han sido arrestados bajo sospecha de estar involucrados en el tiroteo de Moussa Hassouna, de 25 años. Un grupo de manifestantes enmascarados arrojaron piedras contra casas judías avivando la llama de la tensión en todo el territorio. Los árabes israelís, que suponen más del 20% de la población del país, se solidarizan en las calles y en las aulas, como los estudiantes que se han declarado en huelga. 

Además, el candidato a formar Gobierno, Yair Lapid, había anunciado que esta semana formaría su Ejecutivo. Junto a los ultra de Yamina liderados por Naftali Bennett, buscan el apoyo de los partidos árabes que hasta ahora se habían mostrado dispuestos a brindarle sus escaños con tal de formar un Gobierno sin Netanyahu. La escalada de violencia más alarmante en los últimos años puede poner en riesgo esta alianza sin precedentes.