Al menos seis personas han muerto, entre ellos el sospechoso, este jueves en un tiroteo en la ciudad de Plymouth, al suroeste de Inglaterra, según ha confirmado la Policía de Devon y Cornualles.

El incidente ha tenido lugar en el área de Keyham sobre las 18.10 horas (hora local), tras lo que la Policía y personal sanitario han acudido al lugar, según ha precisado el cuerpo en un comunicado difundido a primera hora de este viernes.

A su llegada han confirmado el fallecimiento de dos mujeres y tres hombres, uno de ellos el sospechoso, Jake Davison, de 20 años, que se habría quitado la vida disparándose a sí mismo después del tiroteo, por lo que la opción del terrorismo, o un ataque de la extrema derecha, han quedado descartados.

Según recogen algunos medios británicos, Davison había compartido en las últimas semanas a través de sus redes sociales vídeos en los que mostraba su frustración y desesperación por no encontrar trabajo, perder peso, o conocer a chicas.

Entre las víctimas mortales hay también un menor de diez años. Otra mujer ha sido trasladada al hospital, si bien ha fallecido poco después, mientras los familiares de las víctimas han sido localizados e informados de la situación.

Se trata del peor tiroteo en relación al número de muertos en más de una década en Reino Unido, desde que en 2010 un taxista mató a una docena de personas en Cumbria, en el noroeste de Inglaterra.

Los testigos han descrito haber escuchado disparos y algunos han precisado que han visto a un hombre empezar a disparar "al azar" con "una escopeta" contra la gente en la zona de Keyham, recoge DPA.

Al respecto, el diputado local Luke Pollard ha dicho que varias personas estaban siendo tratadas por sus heridas en el hospital y ha señalado que "una de las personas muertas en el tiroteo era un niño menor de diez años".

Antes de conocerse el número de víctimas, la ministra del Interior de Reino Unido, Priti Patel, se ha manifestado al respecto del incidente, que ha tildado de "impactante". "Mis pensamientos están con los afectados. He hablado con el jefe de Policía y le he ofrecido todo mi apoyo. Insto a todo el mundo a mantener la calma, a seguir los consejos de la Policía y a permitir que nuestros servicios de emergencia sigan con su trabajo", ha expresado.