El desafío a la primacía del derecho europeo puede costarle caro al Gobierno polaco. La Comisión Europea ha decidido pasar definitivamente a la acción y solicitar al Tribunal de Justicia de la UE (TJUE) que imponga una multa diaria a Polonia por incumplir las medidas cautelares y la sentencia europea de mediados de julio que reclamó la suspensión inmediata del régimen disciplinario del Tribunal Supremo polaco por considerar que no se ajusta al derecho europeo. “Los sistemas judiciales en la UE deben ser independientes y justos. Los derechos de los ciudadanos de la UE deben ser garantizados de la misma forma, independientemente de dónde vivan en la UE”, ha recordado la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.

El caso se refiere al funcionamiento de la sala disciplinaria del Tribunal Supremo polaco, que según ha denunciado la vicepresidenta Vera Jourová, sigue organizando audiencias e incumpliendo por tanto la sentencia del tribunal europeo, así como la suspensión de otras disposiciones de la legislación polaca que afectan a la independencia judicial. Bruselas quiere que el TJUE imponga una multa diaria mientras no se apliquen plenamente las medidas recogidas en las sentencias del pasado mes de julio aunque deja en manos de los jueces precisar la cantidad. “No hemos indicado una cantidad, dejamos en manos del Tribunal fijar la cantidad”, ha añadido el portavoz Eric Mamer.

“Siempre he dicho que la Comisión no dudará en tomar todas las medidas necesarias para asegurar la plena aplicación de la legislación europea. En julio el Tribunal de Justicia emitió dos sentencias clave para proteger la independencia judicial en Polonia” y “es esencial que cumpla plenamente con ellas. Por eso la Comisión, como guardiana de los tratados, ha adoptado esta decisión”, ha explicado el comisario de justicia, Didier Reynders.

Nuevo ultimátum

Además, Bruselas ha enviado una carta de emplazamiento a las autoridades polacas por no haber adoptado las medidas necesaria para cumplir con la sentencia del pasado 15 de julio que dictamina que la legislación polaca sobre el régimen disciplinario contra los jueces no es compatible con el derecho europeo. El Ejecutivo comunitario envió una primera misiva de advertencia el pasado 20 de julio. Las autoridades polacas respondieron el 16 de agosto pero a la luz de la decisión del Ejecutivo comunitario la respuesta no ha sido satisfactoria.

“Tras haber examinado la respuesta, la Comisión considera que Polonia no ha adoptado todas las medidas necesarias. Por ejemplo, las autoridades polacas abrieron recientemente una investigación disciplinaria contra un juez de un tribunal ordinario que aplicó la orden del 14 de julio en un caso pendiente ante él. Además, la Sala Disciplinaria sigue funcionando”, reprocha Bruselas sobre la sentencia que afecta a las medidas cautelares.

En cuanto a la sentencia del 15 de julio, la Comisión considera que Polonia tampoco adoptó las medidas necesarias para ejecutarla. “Polonia informó sobre la intención de desmantelar la Sala de Disciplina en su forma actual, pero sin proporcionar más detalles. Por ejemplo, el Presidente de la Sala de Disciplina siguió designando tribunales disciplinarios de primera instancia para escuchar casos disciplinarios de los jueces de tribunales ordinarios”, avisa la Comisión. Si la respuesta de Varsovia a este nuevo ultimátum vuelve a ser insuficiente, el paso siguiente será abrir un nuevo frente ante el Tribunal de Justicia.