El suelo de Calatayud se abrió de nuevo la noche del pasado domingo, 31 de octubre, tras reventar las tuberías de abastecimiento. Las losetas del suelo se rajaron y se rebajaron unos cinco centímetros en un área aproximada de 30 metros cuadrados de la plaza Islas Canarias. El agua se desbordó por la calle Galdar --paralela al río-- hasta ir a parar precisamente al solar de la casa azul, el inmueble que tuvo que ser derribado a causa de un gran socavón. Algunos vecinos del bloque de enfrente, alertados por la explosión y la inundación de la zona, salieron de sus casas y acudieron hasta la zona afectada.
La causa del estallido --que se escuchó a más de 500 metros-- no dejó en esta ocasión lugar a dudas: el reventón de una tubería. Durante toda la tarde del domingo, técnicos de la empresa Gestión de Aguas estuvieron buscando el punto donde se encontraba la avería, de la que ya se tenía constancia.
Sin embargo, las catas realizadas a lo largo de la calle Galdar, a la cual daba la fachada posterior de la casa azul, no dieron resultado. Pese a todo, los técnicos no consideraron pertinente cortar el abastecimiento del agua y la avería apareció por sí misma durante la noche, aunque eso sí, rompiendo el suelo.
Según explicaron fuentes municipales, renovar la red de abastecimiento de agua potable y el alcantarillado de Calatayud costará alrededor de 12 millones de euros, según el estudio que ha completado la empresa concesionaria de este servicio municipal, Gestión de Aguas de Aragón, al que ha tenido acceso Efe .
Una red obsoleta
Los vecinos afectados por la nueva avería se quedaron sin suministro de agua durante la noche del domingo y el lunes. El encargado del bar Daily News, se mostró indignado por las constantes averías que se han producido en la calle Galdar durante el último año. "Esto es una vergüenza. Cuando no es por la casa azul, es porque hay una avería, durante el último año estamos están sin agua cada dos por tres. El domingo tuve que cerrar el bar por la noche, el lunes no voy a poder abrir en todo el día", indicó visiblemente irritado.
El pasado mes de marzo se produjo un reventón muy similar a cinco metros del punto donde se localizó en esta ocasión. También entonces el agua se desbordó por toda la calle tras romper el suelo.
R. CRISTOBAL
