Los alumnos y alumnas de la Escuela Municipal de Folclore participaron en el festival que se organizó para la tarde del domingo, 5 de junio, en teatro de la Villa. La entrada requería de invitación, que pudo recogerse en la taquilla desde una hora antes de la actuación. El evento fue todo un éxito, fueron muchos los familiares y amigos de los alumnos los que no quisieron perderse el encuentro, llenando el teatro al completo.

Tras la pandemia, este ha sido el primer festival que la escuela municipal ha podido celebrar. El año pasado hubo un riguroso mantenimiento de las clases, en las que se siguieron todos los protocolos covid pertinentes, pero, puesto que los teatros estaban cerrados y los actos sociales muy acotados, se decidió no celebrar un festival al uso, como siempre se ha hecho, y optar por una exhibición de cante y baile en el parque que se encuentra junto a la escuela, a la que acudieron los padres de los alumnos, que pudieron ser testigos del trabajo realizado durante todo el curso

La Escuela Municipal de Folclore cuenta con tres secciones: Canto, con Susana Gil y Efrén Romero al frente; Baile, con Sara Jiménez; y Rondalla, con la docencia de David Cay. Las funciones de coordinación y dirección son realizadas por Sara Jiménez. En el festival actuaron los niños y niñas que, a partir de 5 años, asisten a clases en las diferentes disciplinas, así como personas jóvenes y adultas que se han acercado al aprendizaje del folclore.

El alumnado cantó a las tres provincias aragonesas con de jotas de estilo, dúos y cantos grupales, y se bailaron joticas y bailes tradicionales del folclore aragonés. Para acompañar musicalmente todo ello, estuvieron presentes los alumnos de rondalla dirigidos por el profesor David Cay.

Un atractivo festival que permitió apreciar los avances de los alumnos y alumnas en las tres disciplinas y que sirvió para clausurar el curso 2021-2022, en el que han participado unos 80 alumnos, una cifra muy inferior a los 200 alumnos que ha llegado a tener la escuela, pero que supone un impulso de la cultura y la tradición tras los tiempos de incertidumbre a causa de la pandemia.

Para Sara Jiménez, el folclore «es parte fundamental de nuestra vida y de la cultura aragonesa, hay que apoyarla e impulsarla desde todos los ámbitos de la vida y que no decaiga, y estas escuelas son el futuro para mantener nuestra cultura». Afirma que desde el Ayuntamiento de Ejea, concretamente desde el Área de Cultura, siempre han hecho un gran esfuerzo por poner en valor el folclore, aunque esperan que este apoyo crezca todavía más, a fin de colocar la cultura y la tradición en el lugar que le corresponde.

Asimismo, los niños y niñas ya han tenido la oportunidad de matricularse para el curso que viene, que comenzará a primeros de octubre. Para este nuevo curso se espera poder recuperar algunas actividades, como puede ser el concierto de villancicos que los alumnos realizan en diciembre, intercambios con otras escuelas u otras exhibiciones, como las que han hecho algunos años en la residencia de mayores, donde acudían a bailar y cantar.