La Asociación para la Promoción Turística de la Ruta de la Garnacha reunió a sus socios promotores, la Comarca Campo de Borja y la Denominación de Origen Campo de Borja, el pasado 24 de agosto, con el fin de presentarles la Estrategia Turística de Sostenibilidad Turística en Destinos. Incorporada en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del país, dicha estrategia asignará a los destinos turísticos de Aragón que quieran participar inversiones mínimas de un millón de euros procedentes de fondos europeos.

A principios de agosto, la Asociación para la Promoción Turística de La Ruta de la Garnacha recibía el documento que describía la Estrategia Turística de Sostenibilidad Turística en Destinos y cómo y cuándo acceder a dichas ayudas, que, tal y como especifica la estrategia, ha de solicitar una entidad local, en este caso la Comarca Campo de Borja.

El destino de La Ruta de la Garnacha, que engloba a toda la Comarca Campo de Borja además de Vera del Moncayo y El Buste, cumple con un buen número de los requisitos para acceder a la ayuda. Desde el pasado 2014, la planificación estratégica en materia de turismo se ha desarrollado desde La Ruta de la Garnacha teniendo en cuenta la sostenibilidad, un futuro que ya se anunciaba y con el que se ha trabajado de la mano de Turismo de Aragón y de la Secretaría de Estado de Turismo.

FONDOS EUROPEOS

Esta ayuda, financiada al 100% por fondos europeos –Next Generation–, forma parte de los Programas Extraordinarios de Sostenibilidad. Esto quiere decir que los territorios no tienen que aportar cuantía económica alguna, a diferencia de los programas ordinarios, pero sí un plan de trabajo firme, cumpliendo con los ejes de actuación definidos en la documentación y en línea con las estrategias de desarrollo turístico del Gobierno de Aragón y del Gobierno central. En definitiva lo que se busca es que la industria turística del país camine en un mismo rumbo, velando por su modernización y mejora de la calidad.

Durante las tres anualidades que estará en vigor, la estrategia sumará, nada más y nada menos, un total de 1.850 millones de euros a repartir entre las diferentes comunidades y ciudades autónomas, siempre que estas presenten un plan de trabajo acorde con las directrices establecidas en el Plan Nacional de Sostenibilidad Turística en Destinos.

Aragón solicitará la cantidad de 124 millones de euros, de modo que sus comarcas puedan presentar un Plan de Sostenibilidad Turística en Destinos que les permita acceder a la asignación de una inversión mínima valorada en un millón de euros y con ello hacer frente a la ejecución de las actuaciones de sus respectivos planes.

EN SU MEJOR MOMENTO

La Ruta de la Garnacha ha notificado a la Comarca Campo de Borja que está en su mejor momento para solicitar la ayuda, ya que cumple con no pocas exigencias de la estrategia, entre otras: haber celebrado un proceso de participación ciudadana con el fin de fijar un plan de desarrollo del territorio y de su actividad turística a 10 años de forma sostenible; contar con un consenso político que apoye dicho plan; tener un destino turístico delimitado; disponer de un producto turístico de identidad con el territorio; identificarse con una marca turística consolidada así como contar con un ente gestor del destino. Requisitos con los que la Asociación para la Promoción Turística de la Ruta de la Garnacha trabaja a diario.

Acceder a una ayuda de este calibre sería el espaldarazo definitivo para el destino de La Ruta de la Garnacha, tras diez años de trabajo. Con ello se podrían contemplar acciones del Plan de Gestión del Paisaje que de otra manera no podrían llevarse a cabo por su coste. Por ejemplo, aquellas encaminadas al desarrollo de otros productos turísticos como puede ser el BTT con un especial refuerzo a los existentes, el enoturismo; mejoras en espacios naturales con el diseño de corredores ecológicos que pongan en valor dicho espacio vía rutas; adaptación de senderos que atiendan a la accesibilidad universal; y potenciar el producto local, kilómetro cero.

También el impulso de herramientas de promoción y comercialización turística del destino; aplicación de sistemas de inteligencia turística controlando, entre otros, aforos y capacidades de carga; dinamización del sector turístico, tejido empresarial; descarbonización con la implantación de sistemas digitales de gestión de la huella del carbono; desarrollos de realidad inmersiva que permitan anticipar experiencias turísticas en el destino; implantación de certificados de sostenibilidad;: y un largo etcétera.