Varios expertos ferroviarios y especialistas implicados en la construcción de la línea de alta velocidad Madrid-Zaragoza aseguraron a EL PERIODICO DE ARAGON que los primeros trenes no podrán entrar en servicio hasta marzo, casi dos meses más tarde de lo que preveía el Gobierno central. El retraso acumulado en la instalación del complejo sistema de control de la vía y las propias pruebas de seguridad son las principales causas que llevan a augurar el retraso del AVE, que tendría que haberse inaugurado ayer de haberse cumplido las promesas oficiales durante los últimos años.

La demora fue reconocida por el propio ministro de Fomento, Francisco Alvarez Cascos, a este diario hace unas semanas y ratificada posteriormente en el Congreso, pero no se atreve ahora a aventurar una nueva fecha. No obstante, las autoridades trabajan con el objetivo de intentar inaugurar la línea entre finales de enero y principios de febrero, pero los técnicos tienen más que serias dudas al respecto. De hecho, las pruebas de calibración del corredor ferroviario no habrán acabado antes de un mes.

INCOGNITAS OFICIALES Los responsables del Ministerio de Fomento y de la sociedad estatal de la alta velocidad (GIF) han estado machacando durante años que el AVE llegaría a Zaragoza a finales del 2002, pero la realidad les ha obligado a cambiar sus planes. El ministro de Fomento, Francisco Alvarez Cascos, manifestó en noviembre que la inauguración oficial coincidirá con la puesta en servicio comercial. Hace sólo unos días añadió en el Congreso que uno de los dos sistemas de control de vía --el tradicional-- podría estar listo a mediados de enero, pero reconoció que el sistema que realmente hará del AVE el tren más rápido del mundo --el novedoso sistema ERTMS-- carece de calendario.

Los especialistas consultados apuntan que podría incluso demorarse hasta principios de marzo. Este sistema de señalización y control de vía que pretende unificarse en la Unión Europea aún no se ha instalado en ningún país, por lo que las pruebas y las supervisiones deben ser extremas.

BAILE DE DIAS Los planes iniciales, los que barajaba la exalcaldesa Luisa Fernanda Rudi, era inaugurar el AVE y la superestación de Delicias el día del Pilar --12 de octubre-- de este año, un objetivo que ya fue descartado por los técnicos al poco tiempo de lanzarse esta fecha en círculos políticos. Incluso a finales del 2000, responsables del GIF ya advirtieron que la propia estación intermodal se inauguraría por fases: en el 2002, la terminal ferroviaria; un año después, la de autobuses y en el 2004, los dos hoteles que incluye el macroedificio .

El pasado verano se hizo público incluso el día escogido para la inauguración de la línea de alta velocidad --el 21 de diciembre-- y la previsión de que el propio rey Juan Carlos presidiera el viaje inaugural entre Madrid, Zaragoza y Lérida. El pasado mes de octubre, los trabajadores de Renfe en la capital aragonesa tuvieron confirmación de la fecha por parte de los responsables de la compañía. Por aquel entonces, las obras de construcción de la línea aún no habían acabado y la estructura de la estación intermodal estaba muy lejos de ser una realidad. Y aún quedan semanas.

El secretario de Estado de Infraestructuras, Benigno Blanco, llegó a señalar con contundencia en la única visita realizada a la estación intermodal, a finales de octubre, que las previsiones oficiales se mantenían. Dos semanas después, el presidente de la sociedad estatal del AVE, Juan Carlos Barrón, daba por hecho el retraso por la necesidad de probar la moderna línea del AVE y al cabo de unos días Alvarez Cascos lo confirmaba finalmente a este diario.