"Manu, dame la mano que me mareo". Alfredo Boné, el candidato número uno del Partido Aragonés a las Cortes, estaba tumbado en una camilla en el interior de una unidad móvil de Donantes de Sangre. Con los pies en alto, la camisa remangada y un tubo de goma clavado en su antebrazo, bromeaba con su compañero de camilla y de partido, Manuel Blasco. Los dos habían acudido para donar sangre y, de paso, hacer campaña por el barrio de Las Fuentes.

Como en el colegio, primero habían dado la clase teórica exponiendo sus propuestas de acción social en la sede electoral del paseo Pamplona y después vino la práctica: la donación de sangre, la visita a la Fundación Ramón Ardid, el encuentro con colectivos inmigrantes y la visita a la Asociación de Sordos. Según Blasco, "para predicar con el ejemplo".

En principio no estaba previsto ningún paseo ciudadano. Sin embargo, hubo que improvisar uno por la calle Compromiso de Caspe cuando, después de media hora de espera, se descubrió que la unidad móvil de Donantes de Sangre estaba aparcada 200 metros más abajo del punto de encuentro fijado. "¡Tan móvil, tan móvil, que no la vamos a encontrar!", bromeaba Manuel Blasco.

Ana de Salas, Blanca Blasco, Fernando Arcega, Sergio Larraga... Los enfermeros se frotaban las manos pensando en los litros de sangre institucional que iban a extraer. "¿Van a donar todos, no?", preguntaba uno de ellos. Boné parecía más activo de lo habitual. Quizá por los nervios, se movía de un lado a otro del vehículo e incluso se quitó la corbata antes de pasar a medirse la tensión y hacerse la prueba de la hemoglobina. No obstante, en su línea, estaba guasón: "¿La queréis del brazo izquierdo o del derecho? Lo digo porque del centro va a ser complicado". Al final, el catéter se colocó en el antebrazo izquierdo. ¿Casualidad?

En unos minutos superaron la prueba. ¡Y sin marearse! Como premio recibieron un llavero de Donantes de Sangre, ése en el que se ven dos corazones entrelazados por una gota de sangre. Boné lo miró con atención. Como pensando a qué corazón se unirá el de su partido a partir del 25 de mayo.

Fuera del vehículo se había ido amontonando la gente. La mayoría, vecinos de Las Fuentes que se habían acercado a colaborar llamados por el anagrama de Donantes de Sangre. Algunos de ellos se quedaron de piedra cuando vieron bajar de las escalerillas a los candidatos del PAR. "¿No son estos los de los carteles de las farolas?", preguntaba una mujer a otra. Algunos los miraban con cara de resabiados. "Claro, ahora que hay campaña donan sangre y lo que haga falta", decía alguno. Efectivamente, tanto para Boné como para Ana de Salas ésta fue su primera extracción. Otros, como Manuel Blasco, ya tenían la ficha de donante hecha.