El edificio comercial que forma parte del proyecto elaborado por el estudio Lamela para reconstruir el estadio de la Romareda puede tener sus propios plazos de ejecución, al margen del campo de fútbol. Según los autores del diseño, las dos partes del complejo pueden realizarse de forma independiente, aunque el bloque destinado a comercios y oficinas precisa menos tiempo que el estadio para su construcción. En el caso del campo, los tiempos de la obra están condicionados por la obligada convivencia entre los trabajos y las competiciones deportivas: se hará en dos temporadas.