Los difíciles años de la adolescencia y la falta de disciplina son algunas causas del deterioro del clima en las clases, según un estudio elaborado por el Departamento de Educación del Gobierno de Aragón. La ausencia de valores, el contexto familiar y la pérdida del reconocimiento de la figura del profesor agravan la situación que día a día viven los colegios. A pesar de todo, según revela el estudio, aunque la conflictividad existe, los casos de violencia en las aulas son puntuales. Mientras que el 93,5% de los profesores considera que las relaciones con sus alumnos son cordiales, el 2% de estudiantes y docentes considera que el trato es malo y el 63% de los profesores que participaron en la encuesta aseguraron que no habían presenciado un caso de acosos nunca. El 58,4% de los docentes consideró que el aumento de la violencia en la sociedad es la causa de los conflictos.
Para solucionar los problemas de convivencia en las clases, los 640 profesores que participaron en el estudio realizaron una serie de propuestas. Solicitaron más psicólogos y orientadores en los centros educativos que apoyen su labor y más planes de convivencia.
