El comprador de un edificio de nueva construcción podrá disponer de un certificado con las características energéticas del inmueble. Y es que una directiva europea obliga a integrar el dato medioambiental de la eficiencia energética a la hora de adquirir una vivienda. De ahí que Aragón se esté preparando para crear un registro sobre dicha certificación basado en unos cálculos y normas de calificación. Un proyecto que ayer salió a exposición pública mediante una orden del Departamento de Industria, Comercio y Turismo, que publicó el BOA, y que regulará también el control externo, que se encomendará a entidades de control externo autorizadas por la Administración. "Debido a la intervención de múltiples agentes de la edificación en distintas fases del proceso constructivo, y para evitar discrepancias entre las partes, en el articulado de este decreto se describen las obligaciones y responsabilidades de cada uno de los agentes que intervienen en la certificación energética de edificios", puede leerse.
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